Cuando a una persona le dan un difícil diagnóstico sobre su estado de salud, la reacción de la gente, por lo general, es de simpatizar con ella. Sin embargo, no es lo que le ocurrió a Charlie Sheen.
Si bien es cierto que, debido a su largo historial con drogas, alcohol y mujeres; se esperaba que en algún momento el polémico actor hiciera una revelación como la de hace una semana (que es VIH positivo), la reacción, más que ser de impacto y/o solidaridad, se prestó para que muchos se dieran un festín con su desgracia.
Y no sólo lo decimos por lo que ha salido desde entonces en la prensa, sino que también por la cantidad de rumores que han surgido y afirmaciones de supuestos cercanos y mujeres que en algún momento tuvieron algo con él.
No hablamos de su ex compañera de elenco en «Two and a Half Men», Jenny McCarthy, quien se molestó cuando supo la realidad del comediante, porque cree necesario que ese tipo de virus y enfermedades deberían informarse antes de protagonizar escenas románticas y sexuales; sino que de aquellos que han tratado de sacar provecho de la condición de Sheen.
Una de ellas es Bree Olson, actriz porno y ex pareja del actor, quien aseguró que éste jamás le dijo que era VIH positivo y que se enteró primero por algunos sitios de farándula estadounidense que habían adelantado que él iba revelar su diagnóstico. Según contó Olson, no sólo se puso furiosa, sino que inmediatamente se dirigió a una clínica a realizarse exámenes, los cuales resultaron negativos.
Por otra parte, surgieron diversos rumores relacionados a las extorsiones que habría sufrido el actor, no sólo por parte de aquellos que sabían su condición, sino que por quienes han asegurado que tienen pruebas de cómo se habría contagiado.
Ello sería por medio de videos en los que aparecería Sheen teniendo relaciones sexuales con otros hombres. Según afirmaron medios de farándula estadounidense, en las últimas semanas el actor habría estado siendo amenazado por personas que tendrían estas imágenes en su poder, por lo que ha gastado millones de dólares para mantenerlos bajo siete llaves.
A eso se suman las declaraciones de Anna Gristina, dueña de un prostíbulo de Manhattan, quien aseguró que ella le conseguía prostitutas a Sheen y a su ex esposa Brooke Mueller. Para mantener el secreto, el ex protagonista de «Two and a Half Men» les daba a cada una propinas entre US$ 5 mil y US$ 10 mil dólares a cada una si tenían sexo con él sin protección, algo que algunas aceptaban con la esperanza de quedar embarazadas y otras lo hacían para complacerlo.
Sin embargo, lo que más ha llamado la atención han sido las revelaciones que hizo su asistente, Steve Han, sobre un incidente en una fiesta con prostitutas. En aquella ocasión, Sheen estaba completamente ebrio y drogado, por lo que en un momento resbaló y se cortó en la pierna.
Su sangre se esparció por varios lugares y la reacción del actor fue lo que más impactó, ya que según Han fue la señal de que había algo malo con el actor.»En aquel momento pensé que a lo mejor tenía hepatitis C o algo así, nunca me imaginé que pudiera ser peor. Sabía que pasaba algo, pero no sabía qué», aseguró al «Daily Mail».
DC|El Mercurio