El cadáver de una orca varada reveló la terrible contaminación en las costas de la Bahía de Plettenberg, tal como lo denunció, en su cuenta de Facebook, Gwenith Penry, coordinadora de Plett Strandig Network, grupo que defiende la conservación de los animales.
Los expertos que hallaron el cadáver del cetáceo de seis metros de largo encontraron en el interior del estómago gran cantidad de desperdicios producidos por humanos, conforme se puede ver en las fotos difundidas en Facebook. Basura dejada por turistas que acuden a las playas sudafricanas.
Las imágenes difundidas en Facebook muestra la triste historia que viven los animales marinos por la contaminación. «Te da una buena idea de lo que estaba sucediendo a los animales», dijo Penny.
De acuerdo a lo dicho en Facebook por la activista, las orcas suelen alimentarse de mamíferos, lobos marinos, delfines, calamares gigantes o cualquier tipo de pez grande. Que haya ingerido estos desperdicios demuestran la desesperación que vivió.
DC | El Comercio