Francisco Martínez, presidente de Fedecámaras, expresó que Venezuela vive un proceso creciente de encarcelamiento económico y aseveró que el socialismo del Siglo XXI “no ha servido para nada”.
“Progresivamente a lo largo de los últimos 17 años se han ido afectando las bases fundamentales de la economía. En la medida en que se han venido afectando a las empresas, hemos comprometido severamente muchas líneas y las cadenas productivas están severamente distorsionadas. La crisis ha tenido unas magnitudes tan graves que ha afectado todo el entramado empresarial y productivo del país”, explicó Martínez a El Tiempo.
El dirigente gremial indicó que las pocas empresas que están produciendo en el país, lo hacen con 50% de su capacidad instalada: “Esto quiere decir que a veces pueden parar sus líneas de producción en espera de insumos y materias primas, y cuando les llegan, empiezan otra vez a producir los bienes y servicios. Es demasiado inestable el sistema”.
Con referencia a la llamada guerra económica, considera que es un pretexto del gobierno para intentar transferirle la responsabilidad de la crisis al sector empresarial.
Por otra parte, Martínez considera que para generar un cambio se requiere de un acuerdo entre el Estado, los trabajadores y la empresa privada, que permita la rápida reactivación de la economía.
“El tiempo para la improvisación se acabó. El tiempo para la experimentación social guiada por utopías irrealizables se agotó. El gobierno nacional tiene la llave para poner fin al encarcelamiento de la economía venezolana, para liberar las fuerzas productivas que han estado represadas durante años”, finalizó el presidente de Fedecámaras.
DC|ET