«Lo que más duele es la traición y la injusticia». Con estas palabras Dilma Rousseff se despidió de miles de simpatizantes en las puertas del Palacio de Planalto, sede del Gobierno brasileño, tras ser separada temporalmente de la Presidencia por decisión del Senado.
Rousseff sufrió una abultada derrota en la Cámara alta -55 votos frente a 22- que hoy, después de una sesión que se prolongó durante más de 20 horas, decidió iniciarle un juicio político con fines destituyentes por considerar que cometió un «crimen de responsabilidad».
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, suspendida de su cargo por el Senado, afirmó, este 12 de mayo de 2016 en el Palacio de Planalto, durante su discurso de salida para los brasileños que en el juicio político al que será sometida en el Parlamento, no estará en juego su mandato, sino el «futuro» del propio país.
EFE