La persona más anciana del mundo y la última que había nacido en el siglo XIX en Estados Unidos, Susannah Mushatt Jones, murió hoy a los 116 años, informó hoy la residencia de ancianos Vandalia Houses en el distrito de Brooklyn, en Nueva York.
«Miss Susie», nacida el 6 de julio de 1899 en un pequeño pueblo del estado de Alabama, en el sur de Estados Unidos, murió el jueves en el geriátrico en el que pasó las últimas tres décadas de su vida.
Nacida en una familia de diez hijos, fue a la escuela para niñas negras y trabajó en el campo tras terminar el secundario. Más tarde se mudó a Nueva York, donde trabajó como niñera. Estuvo casada por poco tiempo.
Cuando le preguntaron por el secreto de su longevidad en su último cumpleaños, dijo que había sido el amor y el cuidado de su familia. El festejo del año pasado incluyó no sólo una tarta de cumpleaños, sino también el plato favorito de Jones,tocino, que comía en todos sus desayunos, de acuerdo con el diario «The New York Times».
Jones se convirtió en la más anciana del mundo en junio, después de que la persona que detentaba el récord, un hombre de 116 años, muriera en el estado norteamericano de Georgia, de acuerdo con el Grupo de Investigación en Gerontología con sede en Los Angeles.
Con la muerte de Jones, el título quedará ahora en manos de la italiana Emma Morano-Martinuzzi, de 116 años, que ahora es la única persona nacida en el siglo XIX que sigue viva.
Una francesa llamada Jeanne Louise Calment, quien murió a los 122 años en 1997, fue la persona más longeva de la historia -al menos de la cual se tiene registro-, de acuerdo con el libro Guinness de los Récords.
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