Hillary Clinton se impuso con facilidad a Bernie Sanders en las primarias celebradas el sábado en las Islas Vírgenes de EE.UU., donde estaban en juego siete delegados para la convención demócrata, en la que se elegirá al candidato de ese partido a ocupar la Casa Blanca el próximo año.
El Partido Demócrata de las Islas Vírgenes de EE.UU. detalló este domingo que la ex secretaria de Estado acaparó el 84,2 % de los votos en las islas de St. Croix, St. Thomas y St. John, con una población de algo más de 106.000 habitantes, en su mayoría afrocaribeños y entre los que la esposa del ex presidente Bill Clinton partía como clara favorita.
En cambio Bernie Sanders solo recibió el 12,2 % de los votos, lo que no alcanza el 15 % que establecen las normas del partido estadounidense para que el senador pueda hacerse con algún delegado.
Así, Clinton se anotó los 7 delegados que estaban en juego en estas islas caribeñas, así como los 4 superdelegados que ya habían comprometido su voto, lo que la acerca cada vez más a la nominación demócrata como candidata a la Casa Blanca.
El margen con el que venció Clinton fue casi tan amplio como el que logró en 2008 frente a Barack Obama, cuando se hizo con el 90 % frente al 8 % del actual presidente estadounidense.
En las primaras republicanas celebradas en las Islas Vírgenes de EE.UU. se impuso con facilidad Donald Trump, que será el candidato presidencial por ese partido en las elecciones del 8 de noviembre.
Los habitantes de las Islas Vírgenes no pueden votar en las elecciones presidenciales, como tampoco pueden hacerlo los de Puerto Rico, que hoy celebra también sus primarias demócratas. En esta isla Clinton también parte como clara favorita.
En Puerto Rico están en juego 60 delegados y 7 superdelegados, una cifra relativamente baja también si se tiene en cuenta que el martes se celebrarán primarias en California, Nueva Jersey, Nuevo México, Montana y Dakota del Sur.
La jornada electoral en Puerto Rico arrancó hoy sin incidentes, aunque la campaña de Sanders denunció que no se les había permitido el acceso a los centros penitenciarios, donde miles de presos pudieron votar el sábado.
Además, se quejó de que inicialmente estaba prevista la instalación de 1.510 centros de votación, mientras que finalmente solo se han abierto 455, que aún así son cuatro veces más que el número de centros habilitados en las primarias republicanas que se celebraron en la isla en marzo pasado.
En estas elecciones será la primera vez que se utiliza en la isla el escrutinio electrónico en los centros de votación, que abrieron sus puertas a las 8:00 a.m. hora local (12.00 GMT) y cerrarán a las 15.00 (19.00 GMT).
Además de las primarias demócratas, los dos mayores partidos de la isla celebran también sus primarias para elegir los candidatos a cientos de puestos, entre ellos el aspirante a gobernador por el principal partido de la oposición, y los aspirantes de ambos a ser el representante de Puerto Rico en Washington durante una legislatura que será crucial para el futuro económico de la isla.
Sumida en una recesión desde hace una década, enfrenta ahora una crisis de liquidez que ha llevado al actual gobernador, Alejandro García Padilla -que no buscará la reelección-, a dejar de pagar la deuda.
Además, Washington está a punto de aprobar la puesta en marcha de una junta federal de control fiscal que tendrá poderes superiores a los del propio Gobierno de la isla, con la intención de ayudar a reestructurar la deuda y encarrilar las finanzas públicas.
AFP