El ataque de un dron mató en julio pasado a un alto mando del grupo Estado Islámico en Afganistán, confirmó el viernes el Pentágono, que aseguró que el deceso afectará el reclutamiento y las operaciones del grupo en la región.
Gordon Trowbridge, subsecretario de prensa, dijo que Hafiz Saeed Khan murió el 26 de julio en la provincia de Nangahar, en el sur del país.
El año pasado, el Departamento de Estado designó a Khan como terrorista global, al decir que era líder del Estado Islámico en Khorasan, en el que se incluyen a ex miembros del Talibán pakistaní y afgano.
Previamente, Khan había sido comandante del Talibán Tehrik-e, sin embargo, el año pasado juró lealtad al líder de EI, Abu Bakr al-Baghdadi.
Líderes de Estados Unidos y Afganistán han estado preocupados por el crecimiento del Estado Islámico en Afganistán, especialmente en la región este del país. El mes pasado fueron objetivo de una operación conjunta de ambas naciones, en el que cinco comandos estadounidenses resultaron heridos en la ofensiva, que los funcionarios creen que se trata de la primera instancia en que soldados estadounidenses resultaron heridos en el combate al Estado Islámico en Afganistán.
Trowbridge dijo que se sabía que Khan participaba directamente en los ataques en contra de las fuerzas estadounidenses y de la coalición, y señaló que su grupo del Estado Islámico utilizaba Nangarhar y le región para entrenar y equipar a los combatientes y brindar «continuo abasto a los soldados enemigos».
DC | AFP