Mientras algunos lo catalogan como una obra divina de Dios y otros lo ven como una horrenda criatura del demonio, un insólito chanchito de ocho patas y dos colas nació en el pueblo Los Mochis, en la ciudad de Sinaloa, México.
Una familia local se dio una gran sorpresa cuando su cerda dio a luz. El particular cochinito nació con cuatro patas y una cola de más. Dedicados a la cría de marranos, presenciaron el nacimiento y por un momento pensaron que se trataba de dos cerditos, pero la segunda cabeza jamás apareció.
Los veterinarios creen que se trataba de dos animales pegados en el vientre de la madre, dado que también tenía dos colas. Algó así como un cochinito siamés.
Desgraciadamente, el animal estaba tan frágil que no sobrevivió.