La secretaría general de la OEA ha denunciado lo que percibe como un recrudecimiento de la represión y de las violaciones de Derechos Humanos en Venezuela antes de la marcha que la oposición ha convocado para el jueves, y ha advertido de que cualquier abuso de autoridad del Gobierno será inaceptable.
En un comunicado, la secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA), dirigida por el uruguayo Luis Almagro, ha expresado su preocupación por lo ocurrido estos días previos al llamamiento de la oposición democrática venezolana del 1 de septiembre.
El comunicado ha explicado que se han recibido denuncias que demuestran el recrudecimiento de la represión y de las violaciones de Derechos Humanos. Se pretende así, criminalizar la protesta, amenazar con inhabilitar a partidos políticos, y castigar la actuación de diputados de la Asamblea Nacional y activistas de la sociedad civil.
Para que las manifestaciones y marchas previstas para este jueves se desarrollen de modo pacífico, la oficina de Almagro ha instado de inmediato el cese de las medidas arbitrarias e impunes que tienen como objetivo deliberado la intimidación de líderes opositores y de la población en general.
La organización ha enumerado varios ejemplos, como el traslado a una cárcel de máxima seguridad del exalcalde opositor Daniel Ceballos, y ha subrayado que los intentos de intimidación de la población ante la proximidad de instancias de expresión popular resultan propios de los más connotados regímenes autoritarios a lo largo de la historia.
La Secretaría de la OEA ha pedido al Gobierno de Nicolás Maduro permitir las manifestaciones y evitar medidas que puedan alentar la violencia y generar climas de confrontación, tales como la programación en el mismo día de marchas y manifestaciones pro gubernamentales.Los líderes opositores venezolanos han solicitado este mes a Almagro que enviara observadores de la OEA a la marcha de protesta convocada para el 1 de septiembre, y han comunicado que van a cumplir esa petición.
El Gobierno de Venezuela ha rechazado la disposición de la Secretaría General de la OEA de trabajar para asegurar las mayores garantías para las marchas y manifestaciones previstas. El hecho de haber negado una propuesta que otorgaba garantías a la gente para el ejercicio de sus derechos ha demostrado una negativa por asegurar al propio pueblo sus condiciones de paz y tranquilidad.
La alianza de partidos opositores Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ha convocado hace semanas la protesta del jueves y ha asegurado que será pacífica, pero el chavismo ha reiterado que el objetivo de esta movilización, denominada la «Toma de Caracas», es de sublevación contra el Gobierno del presidente Maduro.
DC|EM