Una de las noches más especiales en la relación de Marjorie de Sousa y Julián Gil fue la velada en la que el actor le pidió matrimonio a la venezolana.
«Nunca había dado un anillo», empezó explicando Gil a People en Español en exclusiva.
«Tuve tan solo dos días para poderlo hacer y quería que fuese lo más mágico posible», añadió el actor. «Quería que fuese como una montaña rusa de emociones por las que pasara ella».
«Lo que más le costó fue arrodillarse», recordó Marjorie entre risas.
«Yo sabía que me iba a decir que sí», dijo Gil, aunque De Sousa nos contó que tardó en contestar debido a las lágrimas. «Me tardé un montón y el me decía: ‘No me vas a responder, no me vas a decir nada’. Y yo lloraba y lloraba».
Para la ocasión, Julián quiso que todas las personas que habían formado parte de su historia de amor estuviesen presentes. «Gracias a Dios pudimos juntar a los que tenían que estar».
El actor nos confesó sentirse muy satisfecho del resultado. «Yo creo que se logró, porque fue muy bonito. De mi parte le veía la cara… porque fueron muchas emociones, una tras otra, y nunca la había visto así… Para tú sacarle lágrimas a una actriz sabiendo que son sinceras es difícil».
Pasado el torbellino de emociones y con el anillo en el dedo, la pareja aseguró que esa noche les costó parar de pensar en lo que había sucedido. «No nos podíamos dormir».
«Siempre quise una pedida de mano original. Todas las mujeres soñamos con eso… Y yo decía: ‘Alguien que haga esto por mí’. Yo veía que a muchas amigas les pasaba, mucha gente conocida que le pasaba, y yo decía: ‘A lo mejor no me toca vivir esto. A lo mejor me tocará quedarme sola… A lo mejor el matrimonio no es para mí», explicó De Sousa, quien no se podía creer lo que estaba viviendo.
«Sí lo estoy viviendo, esto es para mí. Y le veía la cara a mi mamá y a todas las personas que estaban cerca, que además me conocen muchísimo y yo decía: ‘Sí es real, sí está pasando esto… Fue maravilloso».
DC | Pepole en Español