El control glucémico es fundamental para evitar las complicaciones de la diabetes. Cuanto más alto suban los niveles de glucemia (azúcar en sangre) de una persona, mayor será el riesgo de que sus tejidos y órganos empiecen a dañarse. Saber mantener la glucosa en niveles no tóxicos es una de las tareas fundamentales de los médicos.
El médico internista José Luis Colina Balzán, indicó que el buen control metabólico permite evitar, retrasar o disminuir la progresión de la diabetes, condición que se manifiesta por una deficiencia de insulina que produce el páncreas (Tipo 1) o por una paulatina y progresiva disminución de la insulina o la resistencia del propio organismo a usar la hormona correctamente (Tipo 2). Siendo la Tipo 2 la más frecuente entre la población mundial.
Colina divide las complicaciones de la diabetes en: agudas (Hiperglucemia e Hipoglucemia); y crónicas, afectando de manera progresiva y programada a cada uno de los órganos y sistemas, especialmente riñón, corazón, retina y sistema nervioso central y periférico.
El especialista indicó que las personas que están en riesgo de presentar diabetes Tipo 2 son las de 45 años de edad con antecedentes familiares de diabetes, con antecedentes personales de sobrepeso u obesidad, sedentarios, con lípidos alterados, acantosis nigricans, (enfermedad de la piel) ovarios poliquísticos o con antecedentes de diabetes gestacional o con hijos que pesaron al nacer más de 4 kilogramos.
Valores a tener en cuenta
Precisó Dr. Colina que el valor límite de glucosa que se tiene de referencia de una persona sana es de 100 miligramos por decilitro (mg/dl) en ayunas (espacio de 8 horas sin comer). Añadió que un registro entre 100 mg/dl y menor a 126 mg/dl es considerado como una situación pre diabética. Se hace el diagnóstico de diabetes cuando una persona tiene glucemia por encima de 126 mg/dl en ayunas y mayor a 200 mg/dl en cualquier momento del día.
Para poder confirmar estos valores los médicos realizan pruebas como la denominada sobrecarga de glucosa, que monitorea el metabolismo del azúcar en la sangre al medir sus niveles antes y después de ingerir una bebida con 75 gramos de glucosa.
Acciones de control
El galeno señaló que los médicos para poder atender el control glucémico de una persona con diabetes recurren a dos herramientas principales. Una es la educación del paciente a quien se le debe enseñar a vivir con la diabetes, adoptando un estilo de vida sano con buena alimentación y actividad física diaria, atender también su parte psicosocial e incentivarlo a cumplir con estos aspectos para que tenga una mejor calidad de vida.
En segundo lugar está el tratamiento farmacológico, que incluye la administración de medicamentos e insulinas para controlar el metabolismo de la glucosa. En la actualidad se sugiere iniciar la terapia de insulina en una fase temprana. Esto se debe en parte al beneficio de nuevos productos como los análogos de insulina, los cuales combinan eficacia con manejabilidad. “Ya hay estudios que evidencian que los pacientes que logran recibir insulina tempranamente disminuyen la progresión de la enfermedad a largo plazo”, expresó el galeno.
El Dr. Colina reiteró que el control de la persona con diabetes es exitoso cuando se incluyen todos los aspectos: cambios de estilo de vida, seguimiento de las indicaciones médicas sobre fármacos y el continuo chequeo con el especialista.
DC|NP