Un pequeño niño de dos años murió este lunes, durante el mediodía, tras tragarse 20 pastillas para la tensión arterial de su mamá.
El trágico hecho ocurrió en la vivienda familiar, ubicada en el barrio Buena Vista de Maracaibo.
Isamar Espina, madre del niño, estaba acostada junto su otro hijo, un bebé de pocos días de nacido. Su hija de cuatro años observó al pequeño masticando los medicamentos y alertó a su mamá.
La mujer se levantó corriendo de la cama, cargó a su hijo y pidió auxilio a los vecinos. El padre del niño se encontraba trabajando cuando ocurrió el hecho.
Al pequeño lo trasladaron al Hospital Universitario de Maracaibo (HUM) donde falleció minutos después de su ingreso.
DC|Panorama