Tener un bebé es una de las experiencias más maravillosas de la vida, sin embargo, muchas mujeres sienten una especie de tristeza inexplicable los primeros días después de dar a luz.
Aunque el bebé sea precioso y tengamos apoyo a nuestro alrededor, de repente puedes sentirte desanimada, melancólica, exhausta, irritable, nerviosa, preocupada por si serás una buena mamá e incluso asustada, si ahora te sientes más vulnerable e insegura con tu bebé fuera del útero.
Los niveles hormonales bajan, si ha habido intervención médica pueden doler los puntos, las hemorroides, la subida de la leche, los pezones, la cesárea. Todo ello puede provocar un sentimiento de depresión, muy distinto a la depresión postparto. Aquí tienes algunas técnicas y consejos para disfrutar de este período y levantar el ánimo.
1. Duerme cuando tu bebé duerma
La falta de sueño lo empeora todo, así que haz el mismo horario que tu bebé. Si tienes más hijos, pide ayuda las primeras semanas para poder hacer siestas de 20 minutos y recuperarte.
2. Come muy bien
A ser posible ya te habrás dejado algunas cosas preparadas en el congelador, pero si no es así, pide comidas preparadas o cocina cosas nutritivas y sencillas para recuperar fuerzas: pasta, arroz, carne ecológica, pescado, proteínas vegetales, zumos prensados en frío de fruta y verdura y frutos secos. No es el momento de pensar en la silueta. Es el momento de recuperarse. Todo llegará.
3. Sé como quieras ser
No te dejes llevar por lo que crees que las visitas esperan de ti. Ahora, si así lo deseas, puedes convertir tu casa en un búnquer y poner horarios para venir a veros o para atender las llamadas o los WhatsApp. Y si alguien viene, le dices que traiga la cena o venga dispuesto a colaborar en algo que necesites. Porque si las visitas vienen para coger al bebé, sentarse en el sofá y encima tienes que ofrecerles café, eso es darte más trabajo, así que, es mejor que vuelvan en unas semanas.
4. Tener provisión de leche materna
Para superar la tristeza, además de estar el máximo tiempo posible con tu bebé, es necesario contar con algunos momentos en los que puedas estar o salir sin el bebé. Volver a estar contigo misma y pensar en lo que necesitas o en la organización de la familia te ayudará a hacerte la vida más fácil. Si te apetece quedar con algunos amigos, programa un día a la semana para salir con tu pareja y dejar el bebé con alguien de confianza. Y no eres una mala madre por querer tomar ese espacio contigo o con tu pareja, por otro lado, tan necesario para el equilibrio familiar.
5. Después del parto vuelve a visitar a tu quiropráctica
Durante las primeras semanas después de dar a luz es esencial reservar un tiempo para volver a visitar a tu quiropráctica y ajustar el sistema nervioso de la mamá y del bebé. Así se restablece con prontitud un buen equilibrio físico y emocional, disminuyendo el cansancio y aumentando tu funcionalidad. Si tienes más de un hijo, aún es más primordial, pues necesitas mucha más energía para repartirte entre todos.
6. El contacto piel con piel es vital
Dar el pecho aumenta los niveles de oxitocina y prolactina. Estas hormonas están relacionadas con un estado de ánimo positivo. Si por alguna razón, personal o física, el bebé toma biberón con leche artificial, coger en brazos al bebé, besarlo, achucharlo y tenerlo contigo disminuye los síntomas del baby blues de igual manera.
7. Llama a algunas amigas de confianza e intercambia impresiones
Tu madre y tu suegra son maravillosas, pero a veces es mejor hablar con mujeres de tu edad que hayan pasado por lo mismo y puedas sentirte comprendida, más que espoleada a seguir adelante. En este momento sólo necesitas que te escuchen y que te comprendan, no que te juzguen.
8. No eres Súper Woman
Ahora es importante pedir u organizar la ayuda que necesites. Eso no te hace más débil, sino más proactiva, porque no dejas que las cosas te superen y tomas el control de la organización y eso baja mucho el estrés.
Como ves los síntomas del baby blues, son muy distintos a los de una depresión post-parto. Reconocer que es algo normal y que va a ir pasando con el fluir de los días, te ayudará, porque es algo que nos ocurre a todas las mamás. Lo importante es que encuentres la forma de reconectar contigo misma para poder disfrutar del momento tan especial que supone la llegada de un nuevo bebé a la familia.
DC | Agencias