Iván Freites, dirigente sindical de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), aseguró que los trabajadores de la empresa estatal viven una «situación de la calamidad y hambre nunca antes vista».
«No hay ni agua potable en los campos petroleros», expresó. También se refirió a la caída de la producción de petróleo, destacando que este año el déficit es de 300.000 barriles.
«Pdvsa, en el año 2000, tenía 42.000 trabajadores y producía 3,2 millones de barriles (…) Ahorita hay más de 170.000 empleados y producimos 2,09 millones de barriles».
Esta situación ha provocado que incluso escasee la gasolina en estados como Táchira o Falcón. «La importación de gasolina se transformó en un eje de corrupción nunca antes visto», lamentó Freites, quien además afirmó que hay diputados y familiares de ellos que cobran en la empresa.
Ayer el presidente Nicolás Maduro reconoció que existe corrupción en Pdvsa, así que decretó una restructuración de la empresa.
DC|EN