Trece impactos de bala en el cuerpo de Renato López, entre otros descubrimientos por parte de las autoridades, han llevado a la Fiscalía del Estado de México a concluir que el ataque fue directo y con el objetivo de asesinarlo, por lo cual las teorías que apuntaban a un secuestro o asalto han perdido relevancia, aunque no se han descartado.
Aún existe la posibilidad de que los jóvenes hayan perdido la vida porque la familia de López reportó su desaparición a la policía y los criminales prefirieron ultimarlos.
El periódico ‘El País’ reporta que la saña con la que el actor fue acribillado evidencia una intención dirigida, aunque la causa todavía se desconoce. De igual manera se ha deducido que la muerte de Omar Girón fue un daño colateral, pues los atacantes no iban contra él.
Aunque se mantiene abierta una línea de investigación por posibles nexos de este crimen con el narcomenudeo imperante en esa zona, se presume que las víctimas conocían a sus atacantes porque no opusieron resistencia y fueron descubiertos en el interior de un vehículo con los cinturones de seguridad puestos.
Las autoridades ya tienen identificada a la persona que citó a Renato López y a Omar en la Zona Esmeralda para una presunta propuesta de trabajo y las averiguaciones continúan, con al menos dos pistoleros en mente.
Amigos y familiares de los fallecidos aún no se reponen del estupor y los recuerdan en las redes sociales y en entrevistas, mientras esperan que los culpables sean atrapados y se revelen los móviles que condujeron a su triste final.
DC|HC