El hecho ocurrió en el barrio La Alcabala de Petare, cuando un joven de 17 años de edad jugaba carnaval.
La dinámica consistía en grupos de jóvenes que se mojaban unos a otros, sin embargo, uno de los jugadores le lanzó pintura a otro participante generando un conflicto entre los equipos, hecho en el cual el menor fue cortado en el cuello, provocándole una muerte inmediata.
Otro caso, fue el de un niño de 5 años de edad el cual murió en el Hospital Domingo Luciani luego que permaneciera herido de bala desde el pasado primero de enero.
Según testimonio de allegados el menor recibía el Año Nuevo en una vivienda ubicada en Balovento cuando dos presuntos delincuentes dispararon contra la casa y dejaron a 11 personas heridas, entre éstas el pequeño que recibió el impacto estando en brazos de su padre.
Al niño, herido en el estómago, le realizaron 5 operaciones pero no sobrevivió.
DC/G