La selección de fútbol de Estados Unidos llegó a Panamá y se entrenó en horas de la tarde pese al fuerte aguacero que cayó sobre la capital panameña, informaron fuentes deportivas.
La selección estadounidense aterrizó a primera hora, recibió una charla con el entrenador Bruce Arena en el hotel donde se hospeda y luego partió al estadio Rommel Fernández para una práctica.
La lluvia obligó a los jugadores a entrenarse en una cancha alterna de pasto artificial para cuidar el terreno para el partido del martes ante Panamá, clasificatorio para el Mundial Rusia 2018.
La selección de Panamá, con cuatro puntos, es tercera en el hexagonal final de las eliminatorias de la Concacaf para el Mundial de Rusia. Le sigue la de Estados Unidos con tres, los mismos que Trinidad y Tobago y Honduras.
El hexagonal lo encabeza México con siete puntos y le sigue Costa Rica con seis.
Los panameños perdieron el jueves por 1-0 ante Trinidad y Tobago, mientras los estadounidenses golearon por 6-0 a Honduras y ambas selecciones están obligados a ganar si quieren afirmarse entre los tres primeros de la Concacaf que obtendrán el pase al Mundial Rusia 2018, mientras el cuarto jugará una repesca ante un equipo de Asia.
Los dirigidos por Bruce Arena llegaron a Panamá con las bajas por lesión del centrocampista de origen argentino Sebastián Lletget, el delantero Jordan Morris y los defensas John Brooks y Michael Orozco.
Estas cuatro bajas elevan a siete el número de jugadores con los que no podrá contar Arenas para el partido de la cuarta jornada.
El equipo estadounidense ya había perdido al defensa DeAndre Yedlin, el centrocampista Fabian Johnson y el delantero Bobby Wood.
Arena convocó de urgencia al centrocampista hispano Paul Arriola.
Pero el entrenador podrá contar con el experimentado volante Jermaine Jones tras cumplir un partido de suspensión por acumulación de tarjetas amarillas.
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