Pensaba escribir sobre economía, pero a 72 horas de las declaraciones de la Fiscal General de la República Luisa Ortega Díaz, quien declara la inconstitucionalidad de las sentencias 155 y 156 referidas a la supresión de atribuciones constitucionales de la Asamblea Nacional por estar en supuesto desacato, me obligan a hablar del tema.
No hay duda que la declaración de la Fiscal Luisa Ortega Díaz, mueve el cuadro político actual y empiezan ocurrir acontecimientos que pudieran acelerar un proceso de cambio político que tanto necesita Venezuela, sin embargo, la reacción de tan importante evento se ha reducido en determinar si la mencionada declaración de la Fiscal es genuina o se trata de otra acción “truculenta” del Gobierno para distraer la atención de los venezolanos y la comunidad internacional.
Hasta ahora, los hechos más importantes después de la noticia han sido la reunión del Consejo de Seguridad, declarando que el “impase institucional” entre poder judicial y ciudadano se resuelve en casa, rechazando cualquier injerencia internacional en la situación, llama la atención en dicho encuentro la ausencia de la Fiscal General y el Presidente de la Asamblea Nacional, pienso que la presencia de ambos en la reunión hubiese sido interesante, de ser Julio Borges, hubiese asistido acompañado de algún representante de la Iglesia y algún gremio profesional.
Posteriormente el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), declara que por exhortación del Consejo de Defensa de la Nación han decidido aclarar las polémicas sentencias 155 y 156, “borrón y cuenta nueva” según el TSJ, no ha pasado nada, sin embargo, aclaran que la Asamblea Nacional permanece en desacato.
Finalmente, para cerrar con broche de oro, se da el encuentro entre la Fiscal General de la Republica y el Presidente de la Republica Nicolás Maduro, en una aparente y cordial reunión, la fiscal General le entrega el informe de gestión, se estrechan la mano y fin del cuento.
Mientras todo esto ocurre, la oposición venezolana se desgasta entre los que insultan y descalifican a la fiscal, la trasmisión de un video sobre un Guardia Nacional amanerado, algunas protestas aisladas y sin organización, la revalidación de los partidos, un video de Henry Ramos Allup enfurecido contra un supuesto taxi del Sebin entre otras noticias irrelevantes y fuera de contexto.
Decidan ustedes queridos lectores, ¿realidad o ficción? Un amigo, con gran experiencia política me comentaba hace pocas horas que esta situación no es realidad y tampoco ficción, se trata del Bochinche cultural en el que nuestra querida nación ha estado sometida generación tras generación.
No soy quien para juzgar a mi amigo, al fin de cuentas es una opinión, como lo es este artículo, en lo que estamos de acuerdo ambos y es el propósito de mis escritos es que las malas situaciones no son eternas, debemos siempre entre todos tratar de convertir las malas experiencias en aprendizaje para no repetirlas en el futuro, es nuestro deber y responsabilidad seguir impulsando a Venezuela hacia una Democracia Responsable, no importa que sigamos siendo “bochincheros” pero en las cosas serias es inaceptable.
DC / José Lombardi / @lombardijose