Un juez analiza el pedido de prisión preventiva por 18 meses para el expresidente peruano Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia en una investigación sobre corrupción y supuestos aportes ilegales de la brasileña Odebrecht a su campaña electoral.
La pareja no asistió a la audiencia del miércoles, lo que está permitido por la ley, y en su reemplazo estuvieron sus abogados.
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El magistrado Richard Concepción, quien en febrero ordenó la detención preventiva por supuesta corrupción del expresidente Alejandro Toledo (2001-2006), tiene tiempo hasta el jueves para hacer pública su decisión, de acuerdo con las normas procesales locales.
El fiscal Germán Juárez dijo en su exposición que la pareja cometió el delito de lavado de activos porque recibió «dinero de fuente ilícita, la metieron al circuito económico, le dieron una apariencia de legalidad con aportantes falsos».
Explicó que ambos recibieron dinero público de Venezuela para la campaña presidencial de 2006 en la que Humala perdió las elecciones ante Alan García y que en la campaña presidencial de 2011, cuando Humala ganó los comicios, las firmas brasileñas Odebrecht y OAS aportaron dinero que habría estado destinado a pagar sobornos a funcionarios para obtener licitaciones.
Los abogados de la pareja solicitaron tiempo para leer las acusaciones y presentar su respuesta, lo que fue aceptado por el magistrado.
La víspera Humala dijo a periodistas que la solicitud del fiscal era «abusiva» porque con su esposa colaboran con la investigación y que la fiscalía cedió a la «presión» de un sector parlamentario integrado por los partidos ligados a los expresidentes Alan García (2006-2011) y al encarcelado Alberto Fujimori (1990-2000).
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Humala, un militar retirado del ejército, gobernó Perú entre 2011 y 2016. Durante su gestión fue considerado junto a su mujer la pareja más poderosa del país, pero en el transcurso de su mandato su partido político cayó en disputas internas y ahora no tiene representantes en el parlamento.
En diciembre, Odebrecht admitió ante una corte estadounidense que había pagado millonarios sobornos para ganar licitaciones de obras públicas durante los gobiernos de Toledo, García y Humala.
DC/AP