Una vez derrocado este régimen y instalado un nuevo sistema político, pasando desde luego por un Gobierno de Transición Democrático quien está llamado entre otras cosas producir dignidad. Obviamente, ningún plan o políticas podrían desarrollarse a cabalidad o llenar su cometido estratégico deseado, si las conductas empleadas para su implantación no se basan en principios democráticos y en mucha democráticos y en mucha dignidad.
Un Estado que rija sus acciones apoyándose en el principio de la dignidad, levantara respeto y admiración de las demás naciones; obtendrá la solidaridad activa y el apoyo entusiasta de su pueblo y porque los recursos con que cuenta, se verían triplicados en su rendimiento al no ser desviados hacia otros propósitos subalternos o corruptos, lo cual produciría inmediatamente resultados positivos en el orden social, económico y espiritual de la sociedad. La base de la dignidad descansa sobre la veracidad, la identificación con la problemática del país y la responsabilidad asumida por cada una de las conductas y ejecutorias desarrolladas.
Las formas de lucha que apunten en esa dirección son validas.
Nunca jamás en nuevo sistema democrático y republicano debemos callar ningún hecho indigno o de corrupción por que es convertirse en cómplice de los vicios políticos más graves que proliferan hoy en día en nuestra sociedad. Decirlo lleva la responsabilidad de concientizar social y políticamente al país sobre un drama político grave que vemos, sentimos, vivimos y soportamos.
Despertemos la Conciencia Ciudadana en el marco de la Nueva Venezuela en Libertad, en Justicia y en Democracia Soberana.
DC / Ing. José Contreras / Pte. Movimiento de Salvación Nacional Zulia y miembro principal de la Junta Patriótica que impulsa la Transición en Venezuela / contrerasj402@gmail.com / @contrerasj402