Familiares de caídos en las protestas y de presos políticos venezolanos realizaron una sesión de testimonios sobre los casos de violaciones a derechos humanos, tortura, desaparición forzosa, detenciones arbitrarias, entre otros, en el marco del ciclo de sesiones que adelanta la Organización de Estados Americanos (OEA) para determinar si existen crímenes de lesa humanidad en el país.
La activista por los derechos humanos, Lilian Tintori de López informó que en esta segunda sesión, “los testimonios que están dando los familiares de los presos políticos y de todos los estudiantes que son nuestros héroes caídos, evidencia cómo se violan sistemáticamente los derechos de los venezolanos”.
Asimismo agregó que “es muy importante que toda la comunidad internacional, la OEA y la Corte Penal Internacional sepa la verdad sobre lo que pasa en Venezuela. Estos testimonios son enviados directamente a las oficinas de estos dos organismos hasta el 30 de octubre, cuando se realizará la evaluación de si hay crímenes de lesa humanidad en nuestro país”.
El abogado Omar Mora Tosta, destacó que estos testimonios son importantes debido a que “Venezuela atraviesa una crisis muy grande en materia de derechos humanos, por lo que la comunidad internacional volteó la mirada hacia Venezuela para determinar si existe o no delitos de lesa humanidad”.
En este sentido, Mora Tosta explicó que los crímenes de lesa humanidad “son actos o conductas que un Estado puede hacer en contra del pueblo. Aquí en Venezuela hemos visto la recurrencia de actividades de persecución, encarcelamientos. Esta persecución es sistemática y dirigida a una población determinada, por razones políticas, culturales o ideológicas. Estas torturas dejan de ser casos aislados para convertirse en política de Estado”.
En cuanto a los testimonios de las víctimas de la represión y persecución política, David Vallenilla, padre del estudiante David Vallenilla, afirmó que “el asesinato de mi hijo se trató de un fusilamiento. Solo faltó el paredón. Mi hijo fue a protestar por querer un mejor futuro. Toda la cadena de mando que estuvo allí en la base aérea de La Carlota, hasta Padrino López es responsable de lo que pasó con mi hijo. Este fue un crimen que llena todos los requisitos para calificar como crimen de lesa humanidad. Mi hijo solo quería una Venezuela libre y perdió su vida por creer en eso”.
Como representante de los caídos durante las protestas del 2014, Rosa Orozco, madre de Geraldine Moreno, asesinada por un disparo de perdigón a quemarropa, destacó que durante los últimos tres años “la constancia es lo que nos ha mantenido siempre. En el caso de mi hija, el tribunal determinó a los dos militares que le dispararon a quemarropa a mi hija en la cara, autores de tratos crueles y quebramiento de principios y pactos internacionales. Mi hija recibió dos disparos, en el cuerpo y en la cara, pidió clemencia para que no le dispararan y no bastó, le dispararon y perdió el 80% de su masa cerebral y el ojo derecho”.
Por su parte, Cristina Giardinella de Vetencourt, esposa del preso políticos Eduardo Vetencourt, relató las violaciones a las que ha sido sometido desde que fue encarcelado el 31 de mayo de 2017, bajo los cargos de traición a la patria, instigación a la rebelión y traición a la soberanía.
“Mi esposo tiene 65 años de edad. Fue trasladado más de 3 veces y presentado ante un tribunal militar. Actualmente lo tienen detenido en el centro penitenciario Fénix, la cárcel modelo de la ministra Iris Valera. Allí son obligados a cantar y exaltar la gestión de este gobierno. Duermen en colchonetas en el piso, con un cuñete de agua una vez a la semana para su aseo e hidratación. Por una ventanilla con una cuerda, pasan sus propios excrementos en una bolsa plástica, los alimentos y el agua. Mi esposo es castigado por disentir”, agregó Giardinella.
En nombre del diputado por el estado Táchira, Renzo Pietro, su familiar Nahjud Colina, destacó que estuvo aislado y ahora se encuentra en el SEBIN. “A Renzo hoy en día le impiden la visita familiar. Ha sido víctima de tratos de tortura y se le viola su inmunidad parlamentaria. Nunca ha tenido una revisión médica formal, a pesar de haber hecho una huelga de hambre en el 2015 por su libertad”.
La próxima semana tienen previsto realizar la tercera sesión donde otros casos serán expuestos junto a Tintori y los abogados defensores.
DC/NP