Un grupo de insurgentes mataron a 305 personas, entre ellas, 27 niños, cuando rezaban en una mezquita de Egipto. La información fue ofrecida por el fiscal general del país a través de la televisión pública.
Un primer reporte, indicaba que se habían originado 235 muertos y 109 heridos. Los atacantes habrían llegado al lugar camuflados con trajes militares.
La fiscalía, citada por la agencia oficial de noticias MENA, aseguró que los radicales se colocaron en frente de la puerta del templo sagrado y en sus doce ventanas, y comenzaron a disparar de forma «indiscriminada» con armas de fuego automáticas contra los fieles que rezaban.
DC/GB