Una multitudinaria concentración de fieles se unió en la fe y el fervor a la Virgen de Chiquinquirá para acompañarla en la acostumbrada procesión de la Aurora, con la que la Virgen Morena vuelva a su nicho y se despide de sus devotos hasta el año entrante.
La madrugada de este domingo 3 de diciembre, La Chinit recorrió las acostumbradas calles de El Saladillo en peregrinación de miles de personas que la acompañaron hasta descalzas para pagar sus promesas.
La ceremonia transcurrió con total normalidad, a pesar que transitó por muchas calles totalmente oscuras, y reflejó de nuevo el fervor de los zulianos por su virgen La Chinita.
“Yo vengo todos los años a la aurora, pero este es especial porque vine a pagar una promesa caminando toda la procesión descalza”, dijo Betzy Fuenmayor, quien transitó sin calzado todo el trayecto de aproximadamente seis horas.
El conjunto Barrio Obrero de Cabimas, con sus voces estelares, le cantaron las reconocidas gaitas a China en la Aurora y muchas otras que deleitaron a los presentes quienes no dejaban de pedir otra y otra.
Fue un bonito espectáculo de fe inquebrantable donde las lágrimas, los gritos y aplausos se confundieron entre cientos de feligreses que lloraron al ver frente a ellos a la Sagrada Dama del Saladillo.
DC/P