A pesar de tener las mejores intenciones, podrías terminar arruinando tus utensilios de cocina favoritos limpiándolos de la manera incorrecta o usando productos químicos abrasivos. Estas son nuestras sugerencias sobre qué hay que evitar y algunos consejos útiles sobre cómo obtener mejores resultados.
SUMERGES HIERRO FUNDIDO EN AGUA
Remojar una olla de hierro fundido en agua, colocarla en la lavaplatos o tallarla con un estropajo arruinará su superficie de protección. En lugar de ello, lávala a mano con jabón suave y agua tibia, y no te olvides de «acondicionarla» de vez en cuando para darle una ayuda a las capas protectoras. El acondicionamiento implica frotar el sartén con aceite y luego calentarla en el horno para que la grasa forme un revestimiento similar al plástico.
HAS ESTADO DEJANDO TUS CUCHILLOS HÚMEDOS
Si has estado dejando tus cuchillos para que se sequen en la rejilla para lavar, detente. Debes secarlos correctamente de inmediato, ya que al dejarlos húmedos las hojas se opacarán.
USAS ESTROPAJOS EN TUS SARTENES ANTIADHERENTES
Frotar los sartenes antiadherentes con estropajos metálicos desgastará el revestimiento, haciéndolo menos efectivo. Mejor usa una esponja rígida.
DEJAS GRASA EN TUS SARTENES ANTIADHERENTES
Sin ser demasiado tosco con el teflón, debes asegurarte de eliminar todos los signos de grasa y partículas de alimentos de tus sartenes antiadherentes. Cualquier acumulación comenzará a carbonizar la superficie, haciendo que se deteriore.
DEJAS QUE TU CRISTALERÍA SE VUELVA OPACA
Si el agua dura en tu lavaplatos ha hecho que tu cristalería se opaque, debes darle una buena lavada a mano para evitar que la acumulación se vuelva permanente. Un remojo de cinco minutos en vinagre y el uso de una esponja para eliminar cualquier mancha con bicarbonato de sodio debería de ser suficiente.
REMOJAS TU TABLA PARA CORTAR DE MADERA
No importa qué tan sucia o manchada esté tu tabla para cortar de madera, nunca la sumerjas en agua ni la mentas en la lavaplatos. Como material poroso que es, la madera absorberá cualquier líquido y esta humedad interna podría provocar que se deforme o tenga grietas, e incluso puede comenzar a pudrirse. En su lugar, lávala con esponja y déjala secar completamente antes de guardarla.
METES CUCHARAS DE MADERA A LA LAVAPLATOS
Las mismas reglas aplican a la humilde cuchara de madera. Una limpieza muy caliente en la lavaplatos hará que el material se deteriore rápidamente. Si aparecen grietas o hendiduras en los utensilios de madera, deshazte de ellos; esos huecos son lugares perfectos para que se desarrollen las bacterias.
HAS PERMITIDO QUE TUS CUBIERTOS PIERDAN EL BRILLO
Si olvidas limpiar tus mejores cubiertos, comenzarán a ponerse de un color amarillento, antes de ponerse marrón, y luego negros. Evita esta acumulación usando un limpiador de cubiertos que no sea abrasivo una o dos veces al año.
NO ENJUAGAS TU LICUADORA INMEDIATAMENTE
Con todos los recovecos y ranuras que hay alrededor de las cuchillas de una licuadora, es fácil que las partículas de comida se queden atrapadas allí. Esto no solo causará la formación de moho, también podría hacer que las cuchillas se corroan o se oxiden. Asegúrate de enjuagarla bien después de usarla y dejarla secar antes de guardarla.
NO LIMPIAS TU TRITURADORA DE AJO A FONDO
El jabón y el agua simplemente no servirán de nada cuando se trata de limpiar completamente la trituradora de ajo. Usar un palillo de coctel es la mejor manera de asegurarse de haber eliminado cualquier resto de ajo atascado en la rejilla. También podrías usar el método de la papa: simplemente empuja un trozo de papa a través de la trituradora, eso sacará cualquier resto de ajo atascado y se llevará los olores. Un pedazo de pan funciona igual de bien, al parecer.
LIMPIAS TUS TUPPERWARE CON AGUA MUY CALIENTE
Sumergir los Tupperware en agua muy caliente o colocarlos en la parte inferior de la lavaplatos, cerca de las arandelas más calientes, hará que el plástico se ablande y deforme. En lugar de ello, lávalos a mano con agua tibia.
RESTRIEGAS TU QUEMADOR DE ACERO INOXIDABLE
Usar un estropajo de metal en un quemador de acero inoxidable dejará en este rayas de por vida —los raspones también lo harán más susceptible a la oxidación y a las manchas. El blanqueador también puede marcar y dañar la superficie. Usa agua jabonosa y seca con una toalla para evitar las marcas de agua. Termina con un limpiador de cristales si necesitas eliminar las huellas dactilares.
LIMPIAS TU CAFETERA CON VINAGRE
La limpieza de una cafetera con vinagre diluido se ha recomendado como una forma ecológica para conservar la máquina eliminando las incrustaciones de sarro. Pero corres el riesgo de corroer el sello y las juntas de goma que se encuentran en el interior. En lugar de ello, enjuaga con un removedor de sarro que sea suave.
NO QUITAS LAS MANCHAS DE TUS TAZAS DE CAFÉ
No deseches las tazas de café manchadas. Remoja las tazas de té o café con un poco de bicarbonato de sodio disuelto en agua durante la noche y estarán perfectamente limpias al día siguiente.
USAS EL AGUA PARA LAVAR MUCHO TIEMPO
Llenar el fregadero con platos sucios y dejarlos remojando podría parecer una buena idea, especialmente si están cubiertos de mugre terca, pero si los dejas mucho tiempo, el agua sucia formará una mancha desagradable alrededor del fregadero. Mejor invierte en un recipiente para lavar platos.
NO DESECHAS TUS ESPONJAS
Las esponjas y los paños de limpieza pueden ser un caldo de cultivo para las bacterias. No esperes hasta que se deshagan: reemplázalos regularmente y guárdalos en un lugar donde se puedan escurrir fácilmente
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