El río Sena, desbordado en algunos tramos a su paso de París, sigue subiendo de nivel y lo continuará haciendo hasta el fin de semana, lo que ha llevado al cierre de vías de circulación, infraestructuras de transporte público e incluso una parte del Museo del Louvre.
Los museos que se encuentran en la zona tratan de proteger sus obras.
También se está haciendo un seguimiento y una evaluación de posibles medidas ante la crecida en una veintena de otras instituciones culturales, como los museos de Orsay y del Quai Branly, ambos también junto al río.
En la mente de todos están las Inundaciones que afectaron en mayo-junio de 2016 a la región de París (entonces el nivel del Sena llegó a 6,10 metros) y otras vecinas, y que causaron la muerte a dos personas, además de daños materiales superiores a los 1.000 millones.