Patrullas desvalijadas, edificios deteriorados y un pie de fuerza debilitado. Así recibió la nueva gestión municipal la Policía Municipal de Maracaibo (Polimaracaibo), cuya recuperación iniciará con la inversión de 65 mil millones de bolívares.
La policía del municipio pasó a un “deterioro progresivo de sus funciones y su capacidad técnica”, advierte hoy César Garrido, secretario municipal para la Seguridad Ciudadana.
“Lo primero que destaca del abandono de las estructuras es, por ejemplo, que no tienen iluminación nocturna. Esto es un manto negro en las noches”, explicó Garrido sobre el comando de la circunvalación 1, inaugurado en 2004 y sede de la división de Tránsito.
Aparentemente el edificio está en buenas condiciones. No obstante “hay deterioro en las condiciones generales. Ya hemos comenzado a poner orden, había antes rumas de chatarra, además de la lamentable pérdida total de algunas radiopatrullas”, explica Garrido.
Pero, no todo está perdido. En las ruinas hallaron 27 unidades que pueden ser recuperadas y ya inició el proceso. “A estas patrullas —comenta señalando varios Chevrolet Optra— vamos a instalarle motores y cauchos. Se sumarán a las 10 nuevas que acaba de dotar el Ministerio de Interior ”, añade.
Con eso, la presencia de Polimaracaibo, en los 15 cuadrantes de seguridad asignados en tres parroquias debería aumentar. Cubren Juana de Ávila, Santa Lucía y Olegario Villalobos.
La sede policial de la ‘Uno’, a la entrada del corredor vial Cecilio Acosta (que data de 2004), era aprovechada, incluso, por delincuentes. “En el terreno anexo se metían a desvalijar las unidades que quedaron inservibles en ese sitio. Estamos trabajando también en las que se puedan rescatar”, advierte Garrido.
Una comisión avanza, además, en el comando de La Rotarian (inaugurado en 2005), el puesto de avanzada en la zona oeste. “Se está haciendo la evaluación del edificio.”, cuenta Garrido
En la entrada del comando de Atagro voló el cielo raso. Las instalaciones eléctricas están a la vista. Los portones están oxidados y desconchados, emblema de la pérdida de mantenimiento.
Las huellas del abandono están también visibles, por ejemplo, en la negación —durante meses— de la homologación de sueldos y salarios a los funcionarios (aún intervenida, las funciones administrativas seguían recayendo en la Alcaldía de Maracaibo), y hasta en lo más insólito. En uno de los garajes de ‘Atagro’ están ocho cuadros de bicicleta de la brigada ciclística. Ni eso se salvó.
DC / Panorama