Por más de 200 años el amor y el fervor de los venezolanos, han mantenido vigente y con mayor fuerza la tradicional procesión del Santo Sepulcro, celebrada cada Viernes Santo, en la ciudad de Villa de Cura,municipio Zamora, estado Aragua, zona centro norte del país.
Miles de feligreses propios y visitantes de otras partes del país y hasta de lugares fuera de nuestras fronteras, renuevan su espiritualidad y veneración, en la segunda manifestación más importante de Venezuela.
Año tras año, los creyentes adoran al santo para agradecer los favores concedidos y realizar nuevas peticiones de salud, paz, tranquilidad y protección, como un acto de fe que ha sido transmitido de generación en generación.
Las calles de Villa de Cura, se desbordan el Viernes Santos de rostros colmados de emoción y lágrimas, que con rezos y cantos, van al ritmo de la música sacra, que indica cuando se detiene o continua el recorrido de la imagen.
El tradicional recorrido del Santo Sepulcro inicia desde la casa del santo, con el traslado solemne de la sagrada imagen a la Iglesia Matriz San Luís Ruíz, junto con las imágenes de la Santísima Virgen de los Dolores y San Juan Apóstol.
Aunque son muchas las versiones de la llegada de la imagen al pueblo de Villa de Cura, toma mayor fuerza que el santo fuera traído por error en la época colonial, desde entonces esta manifestación se ha convertido en una de las más grandes muestras devoción.
Santo Milagroso
El Santo Sepulcro ha cumplido grandes milagros para sus creyentes, quienes lo llenan de velas, flores, prendas y ofrendas en agradecimiento a la sagrada imagen.
Coromoto Ramírez, encargada de vestir al santo sepulcro desde hace más de 40 años, destaca que es lo más grande que tiene en su vida y estar cerca del santo le hace sentir en paz, por lo que se siente orgullosa de llevar la responsabilidad de vestirlo y confeccionar su atuendo.
«Yo llegue aquí de niña cuando mi abuelo pertenecía al moto auxilio y yo veía al santo, pero jamás pensé que yo iba a llegar a arreglarlo, el día que me nombraron para hacerlo pesé que no iba a poder, y tuve un sueño con él donde me dijo que no tuviera miedo que me iba a ayudar, ese día nunca se me olvida, yo sentí su presencia», relató la señora Coromoto con gran emoción y lagrimas en sus ojos.
La señora Ramírez cuenta que el santo representa la esperanza de un pueblo por un mejor mañana y la confianza de esa mano amiga que te ayuda a resolver tus problemas.
«El santo sepulcro ha hecho muchos milagros, una vez vino una niña de Maracaibo que no podía caminar y yo le dije a su mamá que la metiera a la capilla, y la niña salió caminando agarradita, pero salió caminando, su mamá estaba muy contenta, todas nos abrazamos a llorar, fue algo muy grande para nosotros ver ese milagro concedido por él», expresó.
Generaciones con fe
Esta hermosa tradición se mantiene en los corazones de sus creyentes y más de quienes tienen la oportunidad de vivirlo, y estar de cerca en esta experiencia mágica-religiosa.
Erifer González, quien cumple funciones como Tesorera de la Asociación del Santo Sepulcro, cuenta que con tan solo 11 años de edad comenzó su fe y trabajo por el Santo Sepulcro, en sus comienzos en las labores de electricista.
Erifer ya tiene 27 años con ese sentimiento de amor y devoción al santo, además de un trabajo incansable y muestra de compromiso.
«El viernes santo es el paso más grande de todo lo que es la Semana Santa dentro del pueblo villacurano, el trabajo nuestro no es un solo día, comienza mucho antes desde el mes de enero», explicó.
González comenta que desde el día domingo, hasta el día de la procesión se realizan labores, para hacer la limpieza de la imagen, el cambio de la prenda de vestir (fabricado por la señora Ramírez) y su colchón, la limpieza de los vidrios y lámparas, así como las labores de electricidad, el arreglo de las flores y lazos y la preparación general de la imagen.
Seguridad para el pueblo
El alcalde del municipio Zamora, Rodulfo Pérez, destacó que para este año se esperan recibir más de 80.000 feligreses a la procesión del Santo Sepulcro, por lo que los cuerpos de seguridad estarán activado en el reguardo de la población.
«Durante las diversas actividades religiosas y culturales que se estarán desarrollando durante toda la Semana Santa, se encuentran desplegados en las cinco parroquias del municipio más de 1.200 funcionarios de seguridad y prevención, para que el desarrollo de las mismas se realice sin mayores contratiempos», apuntó.
Pérez resalta que esta histórica tradición representa para el pueblo el amor por la fe cristiana, que se renueva con la veneración al Santo Sepulcro, que arriba en esta oportunidad a su bicentenario.
La religiosidad de un pueblo se palpa en sus costumbres, tradiciones y hechos históricos que son compartidas desde los tiempos ancestrales, como es el ejemplo de la sagrada procesión del Santo Sepulcro, que hoy cumple 200 años de fe, entrega y esperanza por un mejor mañana.
DC / AVN