El gremio licorero en el estado Zulia está en crisis. Así lo han definido sus integrantes, al destacar que las ventas han bajado en un 70 por ciento y que cada 15 días, aproximadamente, dos licorerías cierran en esta entidad.
Zoraya Laguna, presidenta de la Cámara Licorera del estado Zulia, afirmó que un 85% del gremio reúne a negocios pequeños que no gozan de beneficios que tenían en años anteriores. “Ahora el comerciante solo puede comprar de 10 a 15 cajas de cerveza y no las venden todas en un día, ni en una semana. Antes en una cava cuarto se podían llegar a tener hasta 400 cajas de cervezas, pero ahorita no hay capital para eso”, detalló Laguna.
La empresaria asegura que ahorita las personas tienen como prioridad comprar comida y es por eso que algunas licorerías también ofrecen charcutería y víveres. “Los dueños somos los que estamos atendiendo los negocios, nadie quiere trabajar por un sueldo que no les alcance. Así les ofrezcamos otros beneficios como de comida o transporte no les es rentable”, destacó.
“No todos tienen dos millones de bolívares para comprar una caja de cerveza y mucho menos en efectivo”, expresó Laguna, al describir las diversas problemáticas que atraviesa el sector licorero que además de no tener altas ventas, en muchos locales, padecen por no tener puntos de venta por distintas razones. “Se roban los cables, se caen las líneas o simplemente no pueden comprar un punto porque los ofrecen en 150 millones de bolívares que no los hacemos en ventas”, explicó.
En cuanto a la ingesta de cerveza, la preferida del zuliano, se conoció que su consumo ha bajado en un 45% por su alto costo. Los licoreros están preocupados por el alto consumo que se ha dado del cocuy de penca, algunos sin permisologías que pueden acarrear daños irreversibles.
En cuanto a la ley seca que no se decretó esta pasada Semana Santa, Laguna admitió que en 20 años no se veía que una festividad pasará sin cumplir esta ley. A pesar de esto las ventas igual se mantuvieron bajas.
El gremio reúne en un 15 por ciento a los grandes distribuidores y en un 85 por ciento a los pequeños negocios que no venden ni 20 millones de bolívares diarios, según cifras aportadas por Laguna. “Todos los días cambian los precios lo que provoca la descapitalización del comerciante. No podemos fiar, y muchos no cuentan con puntos de venta y si alquilan uno les cobran hasta el 15 por ciento. Comprarlo a través de una entidad financiera significa pagar unos 150 millones e bolívares o sino en dólares que no tenemos“.
Aunado a esto la ausencia del turismo la falta de efectivo y la inseguridad les ha afectado. “El licor más barato puede costar unos 800 mil bolívares, pero ni una quincena alcanza para comprarlo. La gente ahorita tiene como prioridad la comida“, aseveró.
La crisis económica para el gremio ha sido letal para sus ventas pues afirman que son padres de familia que deben luchar por negocios que han mantenido vigentes durante años para poder llevar el sustento a sus hogares.
DC | Caraota Digital