Quién, en su sano juicio, es capaz de resistirse a ese raspado de rompope, a la chamoyada con su chile piquín, o bien, al tradicional helado… Aun cuando esto puede llevar a que se nos “congele el cerebro”.
Y es que, de acuerdo a algunos estudios, una de cada tres personas ha sufrido alguna vez en su vida, dolor de cabeza después de comer helado; lo que científicamente se conoce como “cefalea por estímulo frío”.
¿Por qué sucede?
Normalmente este dolor de cabeza dura 20 segundos, y es producto de la sangre extra que se dirige al cerebro para conservar el calor, lo que aumenta la presión dentro del cráneo.
A este malestar también se le conoce como: sphenopalatine ganglioneuralgia, que significa “neuralgia del ganglio esfenopalatino”.
El ganglio se encarga de transmitir la sensación de frío, desde la parte superior de la boca hasta el cerebro; lo que origina que los vasos sanguíneos se dilaten.
¿Cómo aliviarlo?
Ahora que ya sabes por qué se nos “congela” el cerebro, sabrás que también cómo prevenirlo.
DC | Salud 180