Afirman que ocultan exterminio en “enfrentamientos” policiales
El “enfrentamiento” entre presuntos delincuentes y funcionarios de los cuerpos policiales y de seguridad del Estado, ha marcado la violencia en el estado Sucre en el primer trimestre de 2018, y es también la figura criminal que pone de manifiesto las prácticas de exterminio para contrarrestar los índices delictivos, de acuerdo con una investigación de la Unidad del Observatorio Venezolano de Violencia en esa entidad.
“La Guardia llegó a San Luis II a dispararle a todo el mundo. Ellos no trajeron ninguna orden de arresto, dispararon y a mi hermano Luis Manuel lo acribillaron, cuando cayó al piso lo golpearon y después lo tiraron en la patrulla. Se calmaron cuando llegó la policía estadal”, declararon familiares de un joven de 16 años de edad que vendía papelón con naranja en una esquina del barrio, y fue asesinado. En el lugar otras tres personas resultaron heridas y uno de ellos fue detenido sin recibir atención médica.
El Observatorio de la Violencia indica que testimonios como estos no son únicos en la zona, se recoge en su portal. El 21 de febrero en el sector Jagüey de Luna de la comunidad de Brasil se registró la muerte de Jean Carlos Tinoco, conocido con el alias de “Negro Malo”, buscado por la justicia por asesinato, sicariato, extorsión, además de secuestro, entre otros, falleció en medio de un supuesto enfrentamiento con los cuerpos de seguridad del Estado. También murió uno de sus compañeros.
“No fue enfrentamiento, los guardias nacionales llegaron y mataron a dos personas cuando compartían con unas amistades”, afirmaron testigos del caso a las afueras de la morgue del Hospital Universitario Antonio Patricio de Alcalá, de Cumaná.
“Lanzaron bombas lacrimógenas, se metieron a las casas, los vecinos cuentan que aquello fue dantesco”, expresó el párroco Marcelo Rivas en el foro Violencia, Derechos Humanos y Ciudadanía, organizado por OVV Sucre, en la iglesia Cristo Resucitado.
Jesús Subero, coordinador del Observatorio de la Violencia-Sucre, resaltó que aunque la violencia e inseguridad no son problemas exclusivos de las zonas más pobres del país, son sus habitantes los que padecen de manera directa, los constantes abusos de autoridad.
DC / El Nacional