La ayuda llegó justo a tiempo para un niño de 13 años que estaba a punto de caer de un alto acantilado en Reino Unido.
Afortunadamente el menor fue rescatado en un increíble y angustioso rescatepor parte de elementos de la guardia costera, informó el medio The Telegraph.
El adolescente había comenzado a trepar por una pared de roca en los enormes acantilados de Dover, cuando repentinamente cayó a unos 50 metros de altura.
El miedo invadió el cuerpo del menor cuando se dio cuenta que no podía avanzar ni descender, parecido a las escenas de las películas de acción y catástrofes.
Gracias a los recorridos que hacen los guardacostas en esa zona, se percataron del incidente y debido a la “posición extremadamente peligrosa” en la que se encontraba el jovencito decidieron rescatarlo con ayuda de un helicóptero.
Con ayuda de una cámara puesta en el helicóptero se pudo apreciar la maniobra que realizaron los rescatistas.
Uno de ellos descendió con una polea y encontró al menor “agarrado de las uñas”. Con toda la suerte llegó justo a tiempo y logró evitar que tuviera una trágica muerte al caer en ese peligroso y rocoso terreno.
«Dependía de nosotros y solo teníamos algunos minutos», señaló el guardacostas James Lorraine. El niño ya había estado aguantando «poco más de 30 minutos», aseguró.
DC / debate