Una mujer fue asesinada por su novio ante la mirada anonadada de su infante de cuatro años durante la mañana del previo sábado en un humilde inmueble del sector La Pradera de El Jebe, al norte de la ciudad de Barquisimeto, posterior a una acalorada discusión sostenida por ambos.
La víctima, identificada por las autoridades como Johana Blanco de 23 años, se acercó junto con la niña hasta la vivienda de su pareja, Jorge Peraza de 20 años, para conversar con él acerca de temas domésticos, sin embargo, el hombre estaba embriagándose mientras escuchaba música con su padre – Ramón Alcanio de 68 – y dos hermanos – Moisés de 19 y Junior de 25 – lo que encolerizó a la mujer, desatando el mortífero altercado.
De acuerdo con los testimonios de la vecindad, tras el prolongado intercambio de gritos que ambos protagonizaron en las inmediaciones de la casa, se escuchó la detonación de un arma de fuego, seguida por los llantos de la pequeña, que había salido al porche para suplicar por ayuda mediante gesticulaciones. A pesar de sus intentos de comunicar con señas lo que había sucedido, el papá del homicida logró agarrarla e impedir que atrajera la atención de la comunidad.
Tras haberse consumado el feminicidio, los tres Peraza procedieron a cavar una fosa en el patio de la construcción que habitaban para ocultar los restos mortales de Johana, cuyo cuerpo tiroteado fue envuelto en sábanas blancas. Al percatarse de la situación anómala, los vecinos optaron por contactar a la Policía del estado Lara para denunciar a los hombres, empero, nadie atendió las llamadas.
Con el fin de inquirir acerca de lo sucedido, una patrulla de la Guardia Nacional se apersonó finalmente hasta la escena del crimen, donde aún permanecían los sospechosos, quienes negaron haber perpetrado el delito alegando que estaban allí en búsqueda de la bolsas de alimentación distribuidas por el Comité Local de Abastecimiento y Producción (Clap).
Pese a que las declaraciones convencieron a los efectivos castrenses, motivando su retiro, una comisión detectivesca perteneciente al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) irrumpió en el lugar de los hechos pocos minutos después, lo que obligó a la familia delictiva a emprender una evasión.
El operativo de búsqueda activado en el sector por los organismos de seguridad permitió la captura de tres de los cuatro criminales: lamentablemente Junior logró huir de la Ley. De acuerdo con las autoridades, Jorge mató a su novia con una escopeta de barril recortado, calibre .45 milímetros. La hija de la occisa fue rescatada por los uniformados.
“Como estábamos cansados de que ellos fumaran droga y mataran gente les quemamos la casa para que no volvieran”, denunció una encolerizada mujer ante el equipo periodístico del diario regional La Prensa.
DC | Caraota Digital