El Zulia paralizado por electricidad

Un daño en la fibra óptica,  tras el incendio registrado el pasado sábado en el Centro de Distribución Eléctrica Caujarito, fue lo que mantuvo sin servicio de electricidad, por más de 24 horas, a varios sectores de los municipios zulianos: Maracaibo, San Francisco, Mara, Rosario de Perijá, Machiques, Jesús Enrique Lossada y La Cañada de Urdaneta, que conforman la Costa Occidental.

Así lo explicó, ayer, vía telefónica a PANORAMA, el secretario de Gobierno del Zulia, Lisandro Cabello, quien detalló que en Caujarito “está todo el sistema remoto de comunicación de Corpoelec en la entidad. Desde allí se hace el encendido y apagado de todo el sistema, se sabe si una subestación se está calentando o se apagó”.

“Ese incendio, de unos 300 barriles de aceite dieléctrico, dañó toda la fibra óptica , provocando que el sistema se apagara por completo. Además, en esa sede está una subestación eléctrica de alta potencia, los equipos de la turbina que se está instalando, los autotransformadores y  los cables que se están reparando”, detalló.

Explicó que, luego del apagón, la recuperación de todo sistema “debe hacerse manual y es lo que está haciendo Corpoelec desde la madrugada, con el apoyo de los cuerpos de seguridad. Se está levantando por cada sector las
iguanas”.

Mientras tanto, precisó Cabello, “Cantv se encarga de recuperar la fibra óptica. Aspiramos tenerla conectada hoy mismo (ayer). Se están haciendo unos ‘baypass’ para recuperar el control”.

El secretario reiteró que el siniestro ocurrido a la 1:10 de la tarde del sábado “fue un saboteo porque el aceite dieléctrico soporta altas temperaturas, ya que es el que se encarga de enfriar los transformadores; y lo ocurrido buscaba acabar con el sistema, según el cuerpo de bomberos, que no se apaga con agua sino con una espuma especial”.

De acuerdo con información suministrada por el Ministerio de Energía Eléctrica a esta casa editorial, con este, se elevan a doce los “ataques” a las subestaciones, desde el 11 de agosto de 2017 hasta el 8 de mayo de este año.

Este corte general fue uno de los más prolongados que ha “golpeado” a la entidad. Precisamente, este 24 de junio se cumplen seis meses desde que regresaron las interrupciones del servicio, que no están respaldadas por ningún cronograma oficial.

Diversas comunidades permanecieron sin fluido eléctrico por más de un día. Entre las parroquias marabinas más afectadas destacan Antonio Borjas Romero, Idelfonso Vásquez, Juana de Ávila, Raúl Leoni, Caracciolo Parra Pérez, Venancio Pulgar, Francisco Eugenio Bustamante y Cristo de Aranza.

Sectores como La Victoria, Ciudadela Faría, Mara Norte, La Pícola, San Jacinto, El Naranjal y el barrio Panamericano reportaron la interrupción del servicio desde las 4:00 pm del sábado. La Circunvalación 2 y Zapara quedaron en “tinieblas” desde las 8:00 pm. Mientras que zonas como Bella Vista, La Lago, Tierra Negra, Haticos, El Potente, 23 de enero, El Prado, Fuerzas Armadas, El Milagro y La Plaza sufrieron el apagón a comienzos de la madrugada.

En San Francisco, vecinos de La Coromoto publicaron a través de las redes sociales sus molestias desde las 11:40 de la noche. En Sierra Maestra, la “penumbra” empezó a las 8:00 pm, al igual que en Santa Cruz de Mara.

“No pudimos dormir en toda la noche porque los primeros ‘bajones’ nos pusieron en alerta. Fueron demasiados y tuvimos que desconectar todos los aparatos para que no se dañaran. En la calle de mi casa casi todas las familias amanecimos afuera y así recibimos el Día de los Padres”, comentó Ezequiel Castillo, desde la urbanización Raúl Leoni.

El escenario más duro le tocó a quienes se encontraban en los hospitales. En el ‘Central’ la electricidad se fue a las 4:00 de la mañana y los familiares de los pacientes conectados a respiradores, en medio de una profunda desesperación, consiguieron una pequeña planta eléctrica, dos horas más tarde. Conseguir la gasolina necesaria para su funcionamiento también representó una odisea.

“A los enfermos los tienen en los pasillos, porque en las habitaciones no aguantan el calor, eso es un peligro para ellos. Hasta el agua tenemos que salir a buscar porque aquí no hay”, reclamó,  angustiada, Rafmary Salas, acompañante.

El surtido de gasolina fue otro de los servicios que resultó perjudicado. Las “interminables” colas para bombear permanecieron durante todo el día.

Un chofer de autobús llegó a una estación de servicio y no pudo llenar; le  informaron que había combustible, pero no electricidad. “Estamos esperando para comenzar a trabajar”, le dijo el trabajador de la estación Makro, en la avenida Padilla.

Por su parte, el Metro de Maracaibo no funcionó, pero, en su lugar, activaron unidades de Metrobús que paliaron las dificultades de traslado de los ciudadanos de a pie. Otros se quejaron por carecer de bombeo de agua potable durante el corte.

Las “santamarías” cerradas fue el común denominador de los locales comerciales de Maracaibo. Muchos no pudieron abrir, otros lo hicieron cuando recuperaron la ‘luz’.

“Cuadrillas de @CorpoelecZulia_ desplegadas en las subestaciones para restablecer el servicio eléctrico”, tuiteó ayer la corporación, a las 12:30 del día. No obstante, pese a los numerosos reclamos de los usuarios, el ministro de Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez, no se pronunció.

La semana pasada, Francisco Martín, vicepresidente ejecutivo de Corpoelec, estimó que “en dos meses mejorará el servicio eléctrico en el Zulia”. Entretanto, los zulianos se quejan de tener sus vidas “paralizadas”. Exigen la publicación un cronograma y que eliminen los apagones nocturnos.

DC / Panorama