Dos temas sensibles: despenalización del aborto y el matrimonio igualitario están siendo requeridos en el debate nacional para empujar una agenda de igualdad de derechos, esto a propósito del nuevo texto constitucional que se plantea.
El peso de la discusión recae en este momento en el seno de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), que el pasado 20 de junio recibió propuestas de un grupo de feministas abogando para que entre en una nueva Constitución la educación sexual desde la infancia, acceso a anticonceptivos y aborto legal, seguro y gratuito.
Estos temas parecen estar resguardados en la ANC, pocas voces se atreven a mencionarlo. Aunque la constituyente Ana Sánchez en marzo dijo que se incorporarían los frentes en la plenaria del parlamento oficialista “para trascender y dar espacios a la diversidad sexual”.
Hasta ahora, solo la presidenta de la Comisión de los Derechos de la Mujer por la Igualdad y la Equidad de Género, María León, se limitó a decir que serán discutidos los puntos de las propuestas del aborto, para luego ser llevados ante la junta directiva.
Si este proceso entra en la agenda de sesión, Venezuela estaría ingresando en la lista de países que ya han legislado sobre estos asuntos como Colombia y Argentina. Estos intentos no son nuevos, la Asamblea Nacional en 2014 estando presente la oposición y el oficialismo presentaron un proyecto de ley sobre el matrimonio igualitario que quedó engavetado.
Para la socióloga Maryclen Stelling, dentro del sector oficialista siempre han surgido grupos que se han opuesto en el congreso, “en etapas anteriores la ley sobre despenalización del aborto no ha pasado por el mismo chavismo, ahora, creo que en la praxis, en el país están aceptadas socialmente las parejas y el aborto, ya que es culturalmente común”.
“La sociedad va a impulsar las leyes, y los mismos grupos de derecha, reaccionarios, iglesias, y el mismo chavismo se opondrán”, sin embargo aseguró que actualmente están dadas las condiciones para que ambos frentes se den en materia legislativa.
El debate podría abrirse este año, aunque hay prioridades como lo es atender la crisis económica. En opinión del constituyente David Paravisini, estos temas son “materia pendiente” y la ANC tiene que asumirlos, “ojalá se dé, es una materia pendiente, yo por cierto no soy proaborto sino prolibertad plena de las mujeres de poder tomar sus decisiones, antes de ser proaborto es que las mujeres tengan acceso a la información a todo lo que significa esta acción”.
“Ojalá podamos prontamente discutir este tema, hay por hacer y la ANC tiene disposición, porque son las mujeres pobres las que fallecen por los abortos, esto hay que debatirlo”, dijo.
Mientras que la visión de la Iglesia es otra. Monseñor Oswaldo Azuaje sostiene que la ANC estaría interfiriendo en lo que le corresponde a la AN en cuanto al debate legislativo.
“Este debate no soluciona ningún problema, por el contrario lo agrava, debido a que “es una legalización del aborto, es decir, legalizar el crimen sobre una criatura indefensa, hay circunstancias y realidades, pero no hay nada que pueda justificar el aborto”, enfatizó el representante de la Iglesia católica.
A propósito de una ley que certifique el matrimonio igualitario, destacó que “nunca sería matrimonio si no es entre el hombre y mujer”, por lo que cualquier otra cosa fuera de él significaría una unión”.
Desde la oposición, la diputada por la Asamblea Nacional (AN) Tamara Adrián argumentó que el matrimonio igualitario “debe tocarse en el momento que sea necesario hacerlo, si no, opera que habrá otro problema más inmediato y pasará a segundo plano”.
Aseveró que “no se ve mucha viabilidad en la ANC” para que se den las condiciones de discutir los frentes, ya que “tiene que haber voluntad de entrar en el siglo XXI, y el Gobierno nunca la ha tenido, apunta a ir hacia el siglo XVII”, agregó.
De ser discutida en la AN, dijo que “si bien reconocemos el tema, de aprobarse quedaría en el limbo, debido a las limitaciones de las facultades legislativas que ha impuesto el Gobierno”, al tiempo que enfatizó que de ser certificadas las propuestas en la ANC, “sería un fraude, porque se desconocería el valor de cualquier norma”, aclaró.
De entrar en materia legislativa en el nuevo texto constitucional, estas propuestas debatidas en la salud pública y en la sociedad, procurarían reformar los artículos 76° de la Constitución que reza, “el padre y la madre tienen el deber compartido e irrenunciable de criar, formar, educar, mantener y asistir a sus hijos o hijas”, y el 44° del código civil, “el matrimonio no puede contraerse sino entre un solo hombre y una sola mujer”.
DC | Panorama