El retén de Cabimas ha sido tomado por funcionarios del Comando Nacional Antisecuestro, después del suceso donde mataron a un sargento de este componente militar en Santa Rita cuando participaba de una entrega controlada el pasado 14 de julio.
Los funcionarios hacen requisa en los diferentes pabellones de este centro de arrestos en busca de armas, celulares o cualquier objeto que sea de utilidad para los reclusos para cometer hechos delictivos.
El comandante César Marcano, jefe del Conas, dijo vía telefónica que esta requisa está motivada al hecho de la muerte del sargento Carlos Castillo Arteaga en Santa Rita, cuando se enfrentó a unos delincuentes que extorsionaban a una víctima tras el robo de una camioneta. “El abatido en ese enfrentamiento, era un evadido del retén de Cabimas, y el que se escapó, tenemos información que también se evadió del retén”, dijo el comandante Marcano vía telefónica.
El comandante Marcano declaró que “80% de los delitos en Cabimas son orquestados desde el Retén de Cabimas”, y agregó: “Ya con esto sabrás porqué estamos haciendo este trabajo”.
Un oficial de seguridad del recinto dijo que la primera requisa la hicieron el pasado 15 de julio, “primero revisaron el pabellón A y B y el área de mujeres, luego el jueves 19 empezaron con el pabellón C y se mantienen en los alrededores”.
Cinco funcionarios del Conas controlan a los familiares en la entrada. Instalaron una especie de oficina en un terreno vacío de la calle. Ordenan a los parientes de los reos en cuatro filas, una para cada área del retén. “Cédula de identidad en mano junto con lo que le traen a su familiar”, grita un funcionario cada vez que van a pasar grupos de 20 personas para que hablen con los detenidos por 10 minutos.
Desde la cola se puede escuchar a los reos gritar en coro “¡Queremos traslado, Queremos traslado!”.
Dos funcionarios debajo de un toldo revisan las bolsas plásticas transparentes donde llevan comida y los envases de agua, “a las mujeres solo nos dejan pasar con faldas debajo de la rodilla y una funcionaria nos desnuda y revisa por completo”, dijeron algunas mujeres que esperaban su turno.
Un grupo de funcionarios del comando antiextorsión y secuestro de la Guardia Nacional se ha desplegado en apoyo a los cuerpos policiales de estos municipios de la Costa Oriental del Lago para hacer frente a los extorsionadoresque acechan en esta zona.
Familiares de los internos por su parte, denunciaron que los funcionarios restringen el acceso de comida “cruda” y de un camión cisterna para que les surta agua. “La comida debe ir tirada en la bolsa, nada de jugos ¡nisiquiera pan dulce! solo diez salados o dos campesinos, tampoco dejan pasar ropa, ninguno de los presos se baña”, dijo uno de los familiares.
Ante esto el comandante del Conas exhortó a los familiares a denunciar a los que están promoviendo el delito desde el retén y no entorpecer las labores de los funcionarios militares.
Ayer, era día de visita en el Retén, pero los familiares solo podían estar 10 minutos dentro de las instalaciones y luego salir para dar paso a otros.
DC | Panorama