Las operaciones de rescate con decenas de helicópteros y cientos de barcos seguían este sábado en Kerala, donde miles de personas están sitiadas por las inundaciones que han dejado más de 320 muertos en este estado del sur de la India.
Las autoridades de Kerala advirtieron el viernes a la población de este estado de 33 millones de habitantes, que se prepare para nuevas lluvias torrenciales durante este fin de semana.
El balance de al menos 324 muertos en 10 días fue anunciado por el jefe del gobierno local, Pinarayi Vijayan, que declaró en Twitter que Kerala afrontaba «las peores inundaciones en un siglo».
Ante la crisis que calificó de «extremamente grave», el gobierno local reforzó las operaciones de rescate con más de 30 helicópteros del ejército y 320 embarcaciones para rescatar a las 6.000 personas que siguen atrapadas por la crecida de las aguas, después de haber salvado a miles más.
El sábado el dispositivo fue reforzado. «Desplegamos más barcos y también al ejército para intensificar las operaciones de rescate», declaró a la AFP un responsable del gobierno de Kerala.
Según las autoridades, hay 310.000 personas sin techo que pudieron ser trasladadas a los 2.000 refugios instalados para atenderlos.
Los helicópteros trabajan en la distribución de agua potable y comida en zonas que quedaron aisladas por las inundaciones, y también se enviaron trenes con agua potable hacia Kerala.
El primer ministro indio Narendra Modi llegó el viernes en la noche a Kerala, donde se reunió con autoridades locales e hizo una breve recorrido aéreo por la zona.
Modi anunció, entre otras cosas, «una ayuda de emergencia de 75 millones de dólares (65,7 millones de euros)» a Kerala.
– Nacimiento al rescate –
Uno de los helicópteros que participaba de las labores de rescate, logró salvar a Sajita Jabeel, una mujer embarazada de 25 años, que dio a luz un niño tan pronto llegó al hospital tras ser evacuada vía aérea de su vivienda, informó un militar.
La mujer fue rescatada en el distrito de Aluva, en los alrededores de Kochi, la principal ciudad de Kerala, cuando llamaron para decir que «rompió aguas», contó el piloto Vijay Verma, al canal News18.
Desde esta región se multiplicaban los pedidos de auxilio de los habitantes a través de las redes sociales.
«Mi familia y las familias vecinas tenemos problemas por las inundaciones en la región de Pandanad Nakkada, en Alappuzha», escribió Ajo Varghese en un mensaje ampliamente compartido en Facebook. «Los teléfonos celulares no funcionan. ¡Ayuda por favor! no hay ningún socorrista disponible».
En otro caso, una mujer que se identificó como Sunitha, se negó a ser evacuada sin sus 25 perros mientras su casa estaba completamente inundada y los animales acurrucados en las camas, contó Sally Varma, de la organización Humane Society International.
Finalmente los socorristas encontraron un refugio especial donde trasladar a la mujer, su esposo y los perros.
Un responsable local confirmó los problemas de comunicaciones en la zona, lo cual complicaba la capacidad para contactar a la gente.
Más de 10.000 kilómetros de vías resultaron dañados. El aeropuerto internacional de Kochi cerrará al menos hasta el 26 de agosto.
Kerala, famoso por sus playas paradisíacas, suele llover con gran intensidad durante la estación de los monzones (entre junio y septiembre), pero las precipitaciones resultaron especialmente fuertes este año y afectaron otras localidades del país.
Según el ministerio indio del Interior, 868 personas murieron en siete Estados indios desde el inicio de la temporada de lluvias.