A días de iniciar la visita a Roma, los religiosos venezolanos hicieron pública, a través de las redes sociales, una carta dirigida al Santo Padre, firmada por el presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), el arzobispo de Maracaibo, monseñor José Luis Azuaje.
“Reciba de todos los miembros de la Conferencia Episcopal Venezolana, nuestra palabra y sentimiento de cercanía, fraternidad y solidaridad con su persona y con su ministerio petrino, en la firme convicción que es El Señor Jesús con su Espíritu, quien le impulsa a acrecentar la comunión y la colegialidad en la Iglesia”, expresa la CEV en la misiva.
“Como pastores de este pueblo de Dios que peregrina en Venezuela, lo acompañamos en su proyecto de hacer más visible el rostro de Cristo en la Iglesia, lo que tantas veces acarrea incomprensiones y hasta insidias, pero confiamos en la fuerza del Espíritu que anima y sostiene en todo momento. Compartimos sus preocupaciones y sus decisiones para sanear misericordiosamente aquello que ha generado desaliento, escándalo y hasta deserción de muchos católicos. Ante esto recordamos a Pablo: todo lo puedo en aquel que me conforta”, escriben los obispos en la carta.
Por último, la CEV expresa al Santo Padre que durante la próxima visita ad límina apostolorum renovarán su compromiso de servicio apostólico al pueblo de Dios, en plena comunión con su persona como Sucesor de Pedro.
“Desde Venezuela, -concluye la carta- aun país que sufre, elevamos nuestra oración para que el Resucitado lo siga asistiendo en la conducción de esta Iglesia que quiere seguir siendo en madre misericordiosa, pedagoga, servidora de la humanidad, Iglesia en salida. Cuente con nosotros en este empeño y le reiteramos nuestra filial devoción”.
Según el Código de Derecho Canónico, la visita ad limina apostolorum es realizada obligatoriamente por los obispos cada cinco años para renovar su voto de servicio apostólico ante las tumbas de los apóstoles Pedro y Pablo, ubicadas en el Vaticano, para mantener al Papa al tanto del estado de las diócesis que dirigen.
DC – Runrunes