Se desintegra la República Bolivariana de Venezuela. Destruyeron la obra del Libertador Simón Bolívar
En Venezuela estamos viviendo un proceso pervertido, donde engañan con soberanías sociales, que afecta las libertades, políticas, como económicas, es un proceso dirigido a empobrecer, una agenda ideológica personalizada, dirigida a exterminar a la sociedad. Se ha preparado abiertamente al Estado para la represión política. Con la mira a poseer el Poder total, se destruyen instituciones no sometidas al Estado. Se cultiva el odio de clases, como diseño de política pública, para afectar directamente la actividad económica de los sectores productivos. Situación esta que podemos verificar en los aumentos salariales de manera convulsiva sin la consulta de los sectores productivos, a los fines de asegurar su cierre total.
Todo ello, comprueba la agenda de enrumbar al país al quiebre como a la pobreza, con lo cual aseguran el desempleo masivo, con el cierre de la pequeña como mediana empresa, afectando directamente a la economía del sector privado, para subyugar a los venezolanos y dominarnos, y con ello apoderarse de sus recurso.
Empobrecemos velozmente. Miles de empresas cerradas intervenidas, expropiadas, nacionalizadas por el gobierno. Actualmente no es fácil deslindar lo político de lo económico, el crimen y legitimación de capitales, corrupción, asociaciones internacionales con grupos calificados por la ONU como terroristas, son vivo retrato de lo que estamos viviendo.
La impunidad en este país, aparejada con la descomposición social y económica, alcanza ya extremos de descaros exasperantes, que nos han llevado a la contracción de la economía, y a ser el país centroamericano de mayor inflación, donde el Estado de Derecho no existe y en un entorno donde cohabita con un gobierno forajido.
Un Estado que no responde, a las demandas que hacen sus ciudadanos de abastecimiento de alimentos, ni a sus demandas de medicamentos. Que pone en peligro a todos los venezolanos, que es totalmente incapaz, de mantenerse como un miembro de la comunidad internacional, por ello la donación de los Diez millones de dólares a indonesia.
Un Estado, que no consigue desarrollar estándares de normalidad, las funciones propias del Estado, ni “hacia dentro” ni hacia afuera, cuando sus propios ciudadanos huyen despavoridos de esta guerra sistémica a la que estamos siendo sometidos.
Venezuela, en el contexto de la globalización, representa ya para sus vecinos y para la comunidad internacional una grave amenaza por los efectos de su desintegración, que se verifica con las estampidas de sus ciudadanos que emigran despavoridos.
En este sentido, Bolívar en su discurso de Angostura en 1819, ya los denuncia, cuando dice: “El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política”. Lo que le da fuerza a un Estado sin apellidos, al que no se le deba temer, sino controlarlo y respetarlo, ante la amenaza de un “.
Es importante para los venezolanos y para el resto del mundo saber cuándo su estructura está fallando, donde todo parece estar yéndose al caos y a la locura, hambre, desigualdad, corrupción, muertes por falta de medicamentos, donde nuestras esperanzas de pasar al siguiente milenio son cada vez menos alentadoras. Esta situación que debe ser resuelta por el derecho y más cuando existen bases constitucionales las cuales dan una idea concreta para creer que esta situación es realmente una situación jurídica.
Es por eso que vemos a un Rey cobarde e incompetente como lo fue Luís XVI de Francia, le fue arrebatado su reino, pensando el muy tonto en una sublevación. Aunque, sus consultores lo desalentaron con la noticia de que era una revolución. Conducida por “El Incorruptible”, una persona con aspecto de mojigato, pero con un potencial de brillante audacia y convicción, y una oratoria capaz de desconocer con palabras hasta los lazos que unían las cadenas de los grilletes, Maximilien Robespierre, abogado y víctima de Saturno, pues la Revolución o causa se traga normalmente a sus hijos.
Siendo así que el pueblo Francés, en el perfecto uso de sus facultades, hizo lo impensable, arrebatándole el poder a un ser demás miserable y heredero de la opresión, en lo que fue un evento glorioso llamado Revolución Francesa.
DC / Dr. Johnny Galue / Abogado, Político / @COOTUR