Moisés Gabriel Saavedra y Jesús Enrique Yánez Ramos, sargentos segundos de la Guardia Nacional Bolivariana, adscritos a la primera compañía del Destacamento 331 del estado Barinas, fueron puestos a las órdenes del Ministerio Público de la entidad por los delitos de intento de homicidio y robo frustrado.
Saavedra y Yánez Ramos atacaron a un hombre que quedó identificado como José Epifanio Dávila Álvarez, un taxista particular de 55 años de edad, a quien luego de herirlo de gravedad, abandonaron en la calle.
El martes 30 de octubre a las 9:00 am, Saavedra y Yánez salieron uniformados del comando situado en Ciudad Tabacare sin ofrecer detalles a sus superiores. A una cuadra del recinto castrense, los funcionarios pararon a un taxista para que los trasladara a la urbanización Las Palmas. Durante el trayecto, y cerca de la Universidad Nacional Experimental de las Fuerzas Armadas, uno de los funcionarios sacó un cuchillo e hirió a Dávila Álvarez en el rostro y luego en el cuello.
El hombre, que sobrevivió al ataque, relató que el otro guardia le quitó el arma blanca a su compañero y lo hirió en otras partes del cuerpo, un total de 15 veces.
Los agresores intentaron huir, pero fueron captados por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana que patrullaban el sector, tres de ellos los detuvieron mientras que el conductor trasladó a la víctima al hospital Luis Razetti, en Barinas. De acuerdo con el diagnóstico médico, Dávila Álvarez presentó traumatismo facial, en el cuello, tórax, abdomen y antebrazos. Fuentes policiales informaron que el taxista se encuentra en recuperación.
Táchira. Varios hombres armados irrumpieron el miércoles en la noche en la sede del Destacamento 212 del estado Táchira de la GNB, para forzar la libertad de dos presuntos paramilitares integrantes de un grupo denominado Los Rastrojos.
Los delincuentes sometieron al sargento Gerson Hernández Sanguino, de 48 años de edad, comandante del puesto situado en La Mulata, municipio Pedro María Ureña, a 20 metros de Colombia. También cargaron con 2 fusiles AK-103 y 5 cargadores con 150 cartuchos en total.
Los dos hombres, integrantes del grupo Los Rastrojos, fueron capturados durante un procedimiento en el que participaron funcionarios de la Unidad Especial de Frontera y se les incautaron dos subametralladoras calibre 9 milímetros y 94 cartuchos del mismo calibre, de acuerdo con medios locales.
Los paramilitares se llevaron la documentación personal y militar, así como cuatro teléfonos celulares y amenazaron con volver si no entregaban a los detenidos.
El Nacional