1.- La música reduce el dolor.
Escuchar música a diario reduce el dolor crónico hasta en un 21%. Cuando escuchamos música liberamos endorfinas, y éstas actúan como analgésicos naturales.
2.- Reduce el estrés.
Un mínimo del 25% de las enfermedades que sufrimos están asociadas al estrés.
3.- Refuerza la salud.
Escuchar música suave también ayuda a reducir la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Por tanto, reduce el riesgo de sufrir problemas de salud.
4.- Estimula el cerebro.
La música con ritmos fuertes hace que la concentración permanezca más aguda y los pensamientos más alerta. Escuchar música suave, en cambio, mejora la capacidad de concentrarse durante más tiempo, y promueve un estado de calma y meditación.
5.- Aumenta el rendimiento.
Un estudio realizado en 2005 demostró que escuchar música mientras se hace ejercicio aumenta la pérdida de peso y ayuda a ser constante.
6.- Facilita el sueño escuchando música
Escuchar música de baja frecuencia induce a la relajación, y facilita y mejora el sueño. Esto ayuda a que nos pongamos en un estado saludable: los efectos del estrés y la ansiedad desaparecen.
7.- Aumenta el optimismo.
La música también puede ser usada para trasladarnos a un estado de ánimo mucho más positivo. Gracias a la música recordamos momentos felices, pero también aumentamos la autoestima y la confianza en nosotros mismos.
8.- Hace de medicina emocional.
Otro de sus múltiples beneficios es que cuenta con la virtud de cambiar el ánimo de una persona rápidamente, y ayuda a tener autocontrol, mejora el poder de seducción y vence la timidez.
9.- Invita a socializar.
La música une a personas que comparten una pasión similar. Ayuda a conocer gente nueva, a hacer vida social y a unir grupos.
Agencias