India anunció el martes haber llevado a cabo un “ataque preventivo” en el que mató a una “gran cantidad” de miembros de un grupo islamista en territorio del Cachemira controlado por Pakistán por lo que Islamabad denunció una “violación” de la frontera disputada.
El ataque, anunció Nueva Delhi, fue contra un campo de entrenamiento islamita del grupo responsable del atentado suicida que dejó unos 40 paramilitares indios muertos, Jaish-e-Mohammed (JeM).
“India atacó el mayor campo de entrenamiento de Jaish-e-Mohammed en Balakot. En esa operación muchos terrorista, formadores, comandantes y yihadistas preparados para atentados suicidas fueron eliminados”, declaró Vijay Gokhale, un responsable de la diplomacia india en una conferencia de prensa.
Hay dos localidades llamadas Balakot en Pakistán: una situada casi en la línea de cese al fuego en Cachemira, y la otra más lejos en territorio paquistaní, en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa. Nueva Delhi no precisó cuál de los dos fue atacado.
Jaish-e-Mohammed (JeM, el Ejército de Mahoma), uno de los grupos armados más activos de la rebelión separatista en Cachemira, preparaba nuevos atentados suicidas en India, afirmó el gobierno indio.
“Ante el peligro inminente, era necesario un ataque preventivo inmediato”, sostuvo Gokhale.
El campo estaba situado en un bosque, en la cima de una colina, alejado de la población civil, precisó el diplomático indio.
Pakistán había afirmado antes el martes que repelió una breve incursión de la Fuerza Aérea india sobre Cachemira.
India “violó la Línea de control” (que sirve de hecho como frontera entre los dos países en el territorio de Cachemira), acusó el portavoz de las Fuerzas Armadas paquistaníes, el general Asif Ghafoor, en Twitter.
“La Fuerza Aérea se movilizó. Los aviones indios se fueron”, indicó.
Los aparatos indios hicieron su incursión del lado del sector de Muzaffarabad, capital del Cachemira paquistaní, agregó en un segundo tuit. Ingresaron unas “3 a 4 millas” (4 a 6 km) en el territorio, precisó luego.
“Confrontados a la respuesta oportuna y eficaz de la Fuerza Aérea paquistaní, largaron a las apuradas una carga útil mientras huían, que cayó cerca de Balakot. No hay víctimas ni daños”, indicó. Se ignora de momento qué tipo de carga se trató.
El general publicó luego fotos mostrando según él el impacto de la carga y pedazos de metal torcido en un sector de bosque.
‘Iniciativa peligrosa’
India acusa desde hace tiempo a Pakistán de apoyar bajo cuerda las incursiones de rebeldes islamistas y la rebelión armada en Cachemira, acusaciones que el gobierno paquistaní rechaza.
Las dos potencias nucleares de Asia del sur se disputan desde hace siete décadas la región himalaya de Cachemira.
“La existencia de infraestructuras de entrenamiento tan grandes, capaces de formar a centenas de yihadistas, no puede funcionar sin que las autoridades se den cuenta”, sostuvo el diplomático indio.
El primer ministro indio, Narendra Modi, reunió el martes por la mañana al comité de seguridad.
El atentado del 14 de febrero provocó una ola de indignación en India con pedidos de represalia. El primer ministro Narendra Modi, cultiva una imagen de duro y aspira a un segundo mandato en la primavera.
El analista militar paquistaní, Hasan Askari, estimó que “la iniciativa que tomó India para satisfacer a su opinión pública es peligrosa”.
“Si tales acciones continúan, pueden transformarse en un conflicto mayor que sólo hundirá la región en una grave crisis”, agregó, interrogado por AFP.
Islamabad, que niega favorecer infiltraciones de militantes islamistas en el Cachemira indio así como las actividades de los rebeldes separatistas armados, ya amenazó con responder en caso de represalia india.
El viernes anunciaron haber tomado el control de un complejo del que sospechaban era la sede del grupo JeM en Bahawalpur (centro), concurrido por unos 600 estudiantes y 70 maestros, según el ministerio de Interior.
AFP