Funcionarios del régimen venezolano culparon este viernes al gobierno de EE. UU. por la muerte del niño Robert Labrador, quien se encontraba recluido en el hospital J. M. de los Ríos a la espera de un trasplante.
Aunque no hizo directa alusión al pequeño, el canciller Jorge Arreaza escribió en su cuenta en Twitter que “lamentablemente falleció otro niño venezolano esperando su transplante de médula ósea como consecuencia del bloqueo criminal de EEUU, que impide transferir fondos a las instituciones italianas de salud con las que PDVSA atendía estos casos urgentes”.
Por su parte, la vicepresidenta Delcy Rodríguez afirmó que dado que el presidente encargado Juan Guaidó “entregó Citgo” a EE. UU. “este robo consumó el asesinato de niños que eran beneficiados por nobles programas de salud”.
Mientras cientos de pacientes siguen falleciendo por falta de medicamentos, funcionarios del régimen continúan culpando a terceros por la crisis de salud desatada durante los últimos 20 años.
NTN24