En un foro en el cual se expuso la situación del sistema eléctrico venezolano, en Barcelona, estado Anzoátegui, el presidente de la Asociación Venezolana de Ingenieros Eléctricos y Mecánicos (Avim), Winstong Cabas, advirtió que «puede ocurrir un nuevo apagón como el del pasado 7 de marzo , dada la alta fragilidad de las instalaciones que sirven para generar, transmitir y distribuir la energía en todo el país».
El Colegio de Ingenieros de Anzoátegui (CIANZ), que preside Freddy López, organizó el evento para informar al público sobre los factores que están influyendo en la mala prestación de este importante servicio público y que está afectando de manera más fuerte a la provincia nacional, que sufre numerosas horas sin luz.
Cabas señaló que las soluciones a estos graves problemas «pasa por la salida de este gobierno que hoy tenemos, porque mientras no existan cambios, no se podrá solventar esta severa crisis».
A la falta de mantenimiento en todas las áreas del sistema, se añaden la desprofesionalización que impera en la empresa eléctrica y la falta de combustible para el funcionamiento de las plantas termoeléctricas. «De 14 mil megavatios instalados, solamente hay disponibles, 1.800 megavatios y la crisis es total, estructural, integral, y la fragilidad en las estructuras se hace cada vez, más fuerte», indicó.
«Podría darse un nuevo apagón nacional y eso es responsabilidad del gobierno nacional que nos ha regresado al año 1960 y tenemos pueblos en total oscuridad. A nadie le importa esta cruda realidad. Aquí fueron invitados todos los alcaldes de Anzoátegui y no hay ninguno presente», expuso el profesional de la Ingeniería.
Recordó el ponente que el sistema eléctrico venezolano fue diseñado con la visión de estadísticas y poniendo el énfasis en mejorar la calidad de vida de la población. «Teníamos la torre de transmisión más alta del mundo, tuvimos la primera represa hidráulica del mundo, y hoy es la tercera y Cadafe llegó a electrificar a más del 90% de la demanda del país. Hemos llegado a esto por falta de mantenimiento y de recursos humanos y financieros. De 53 mil trabajadores, se han ido 35 mil y más de 8 mil ingenieros especializados en la materia, partieron al exterior en busca de mejores salarios. Desde el 7 de marzo , han renunciado más de 5 mil trabajadores», sentenció.
Por otra parte, enfatizó que si no hay repuestos, dotación de insumos y gente con experiencia, no se puede realizar el mantenimiento requerido en estos momentos. «Las centrales termoeléctricas están paralizadas y no hay generación suficiente de megavatios. En estos 20 años hubo dinero suficiente para hacer las inversiones en generación, transmisión y distribución, pero el gobierno se dedicó solamente a abarcar el sector de la generación, donde estaba el dinero para la corrupción, comprando máquinas de generación que no funcionan. La culpa es del gobierno, que es que debe permitir la interpelación en la Asamblea Nacional de quienes manejaron la industria como Rafael Ramírez, Jesse Chacón, Argenis Chávez, Mota Domínguez, Nervis Villalobos y otros».
Destacó que «aquí vivimos esta crisis, no por las sanciones del exterior, sino por la incapacidad de quienes dirigieron esta industria y acabaron con todo y hay que decirle la verdad a los venezolanos».
El Universal