El presidente de Túnez, Beji Caïd Essebsi, murió este jueves a los 92 años de edad tras un mes enfermo y en medio de un conflicto político en su país a causa de la aprobación de la nueva ley electoral, informó el palacio presidencial.
Essebsi había ingresado la noche del pasado miércoles por tercera vez en un mes, aquejado de una «grave crisis de salud», informó su hijo y secretario general del partido que el mandatario fundó, «Nidaa Tunis», Hafed Caïd Essebsi.
Tras la muerte del mandatario, y en virtud a la nueva Constitución, la jefatura del Estado pasa de forma interina al presidente del Parlamento, Mohamad Ennaceur, de 85 años, que también sufre un delicado estado de salud.
Enneceur tiene tres meses para convocar comicios presidenciales, que se celebrarían, si no hay cambios, bajo la antigua ley electoral.
Miembro de la aristocracia política que gobierna en Túnez desde la independencia, Essebsi ha muerto sin ratificar la polémica enmienda a la ley electoral aprobada por el Parlamento hace un mes y que, entre otras directrices, endurece los requisitos para aspirar a la candidatura presidencial.
También facilita el regreso a la vida política y electoral de la vieja guardia que escoltó al derrocado presidente Zinedin el Abedin Ben Ali, durante cuya dictadura Esssebsi ejerció brevemente de presidente del Parlamento.