Los 107 indígenas yukpas venezolanos que desde las dos de la madrugada de este domingo fueron desembarcados en un parque de Maicao porque adujeron incumplimiento de la ayuda económica que les prometió la Alcaldía de Valledupar, retornaron ayer a las 4 p.m. a su región de origen.
El grupo, integrado por 75 niños y 32 adultos, partieron de la capital del Cesar en donde estaban sobreviviendo de la mendicidad en la vía pública desde hace dos años.
Hermelinda Romero, una lideresa del grupo nativo del municipio de Machiques, en el Perijá venezolano, señaló a un funcionario de la alcaldía vallenata de quien solo sabe que se llama Víctor.
La mujer asegura que con ese mismo funcionario acordaron abandonar Valledupar en dos buses, a cambio de herramientas de trabajo como palas, picos y azadones, además de 40 bultos de arroz y tres millones de pesos para la alimentación y el transporte.
Ya en camino hacia Machiques, los indígenas decidieron bajarse en un parque de Maicao ubicado en la calle 16 con carrera 24 para presionar la ayuda económica y la entrega del arroz.
Miguel Romo, director de Migración Colombia para Cesar y La Guajira, sostuvo que la entidad venía trabajando en el caso de los indígenas yukpas que se habían quedado en las calles de Valledupar.
Indicó que este martes se reúnen en Bogotá para analizar la repatriación de los indígenas venezolanos. “Pero, el señor alcalde, quizás por el desespero ante el comportamiento de algunos miembros de esa comunidad, no aguantó más y adelantó la salida. El haberse precipitado hizo que nosotros en Maicao hiciéramos una reunión urgente con el personero, la Policía y un representante del Ejército”.
Le faltaban algunos elementos y se concilió con ellos, gestionamos dos millones de pesos y los acompañamos a Paraguachón. Se fueron con herramientas y con algún dinero para subsistir, mientras se organizan y siguen haciéndolo lo que saben hacer, labrar la tierra”.
El secretario de Gobierno de Valledupar, Gonzalo Arzuza, indicó que “los indígenas pidieron un retorno voluntario y aquí se les ayudó, nada más. Eso de la denuncia no es verdad, se le ayudó, pidieron asistencia y le entregamos unas herramientas, unas botas y lo que pidieron para volver a sus tierras; nosotros al verlos en las calles y como tampoco podíamos tenerlos en ellas, los ayudamos a su retorno voluntario, esa es la realidad y es nuestra voz”.
El Heraldo
