Las futbolistas y los clubes han llegado a un acuerdo este lunes, tras la jornada de huelga de este sábado y domingo, según ha adelantado EFE. Los clubes y los sindicatos Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), UGT y Futbolistas ON se han reunido este mediodía en la sede del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) en Madrid y han pactado un sueldo mínimo de 16.000 euros de salario base al año y una parcialidad del 75%, ha confirmado eldiario.es. Este fin de semana volverá a haber partidos de fútbol femenino de la liga Primera Iberdrola.
Eran dos peticiones que las profesionales exigían como fundamentales: el salario mínimo y la llamada cláusula de parcialidad. Durante estos meses, los sindicatos han hecho varias ofertas para fijar un sueldo base de entre 16.000 y 20.000 euros y que la parcialidad solo pueda ser del 75%. Es decir, que las jugadoras que tengan contratos por horas no puedan cobrar menos del 75% de ese sueldo base.
«Las futbolistas han logrado con su jornada de huelga que se quite la línea roja del 75% de parcialidad laboral y los 16.000 euros anuales de salario mínimo», han destacado desde AFE. En el fútbol masculino, la parcialidad no representa problema, bien porque la mayoría de jugadores tienen un contrato a tiempo completo o porque los salarios son mucho más elevados. En el fútbol femenino, sin embargo, son muchas jugadoras las que tienen contratos por horas que hacen que su salario sea muy bajo.
Las dos partes han fijado también que continuarán las negociaciones. Situaron el 20 de diciembre como fecha probable para la firma del primer convenio colectivo femenino del fútbol español, que ha sido llamado por los sindicatos ‘el convenio de la igualdad’. Las dos jornadas de huelga de este fin de semana que tenían como objetivo desbloquear su avance causaron la suspensión de los ocho partidos de la que iba a ser la novena jornada de la liga Primera Iberdrola.
Un año de negociaciones
Hay otros asuntos están sobre la mesa, aunque el hasta ahora bloqueo en salarios y parcialidad ha hecho que las partes apenas hayan negociado sobre ellos. Siguen pendientes de negociarse los 30 días de vacaciones al año o las contingencias comunes, esto es, que las jugadoras sigan cobrando el 100% de su salario aunque estén de baja. También consideran imprescindible incluir medidas que protejan la maternidad y eviten discriminaciones como las que se han producido (las llamadas cláusulas antiembarazo, ilegales pero que muchas jugadoras firmaron y que implicaban la rescisión de contrato en caso de embarazo), así como un protocolo contra el acoso.
El anuncio de huelga llegó a finales de octubre, después de que la asamblea de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE, el sindicato más representativo) refrendara su convocatoria con el 93% de los votos. El resto de sindicatos negociadores -UGT y Futbolistas ON- también respaldaban el paro. Las tres centrales habían mantenido días antes una última reunión con la patronal, la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino, en la que constataron la ruptura de las negociaciones. Hace un año que sindicatos y patronal del fútbol empezaron las negociaciones para que las futbolistas de Primera División tuvieran el primer convenio colectivo de la historia.
El Diario