Manuel Zamurito González, diputado suplente de Américo De Grazia en la Asamblea Nacional, fue tachado de traidor luego de que el pasado 5 de enero participara en la juramentación del diputado Luis Parra como presidente del Parlamento, en un proceso lleno de irregularidades.
En entrevista para Correo del Caroní, González ofrece su versión de los hechos y responde a la medida disciplinaria que tomó Copei de expulsarlo, a la vez que hizo una serie de acusaciones contra sectores de la oposición que mantuvieron el respaldo a Juan Guaidó al frente de la Asamblea Nacional.
El diputado alegó que el Poder Legislativo era manejado arbitrariamente por los partidos del G4 (Primero Justicia, Acción Democrática, Voluntad Popular y Un Nuevo Tiempo), y que las decisiones se tomaban de manera inconsulta.
Estos cuatro partidos políticos, tras ganar las elecciones parlamentarias en 2015, fijaron un pacto de rotatividad de la directiva de la Asamblea Nacional. Dicho acuerdo se mantuvo hasta este año con la reelección de Juan Guaidó como presidente del Parlamento, dándole a Voluntad Popular su segundo año consecutivo al frente de la dirección de la asamblea.
“El Reglamento de Interior y de Debate lo modificaron sin consulta de muchos parlamentarios; el crédito multilateral también se hizo sin consulta de los parlamentarios; una cantidad de recursos que recibieron de la ayuda humanitaria, jamás se rindió cuenta al Parlamento (…) soy oposición 100% a este gobierno, nadie me va a sacar de la ruta, pero digo el que esté libre de culpa que lance la primera piedra”, dijo González.
El 1 de diciembre de 2019, el portal Armando.Info, medio de comunicación especializado en periodismo de investigación, publicó un reportaje donde se revela que Luis Parra y otros diputados de oposición están involucrados en el caso de corrupción detrás de los comités locales de abastecimiento y producción (CLAP).
– ¿Por qué apoyó al diputado Luis Parra si, de acuerdo con una investigación periodística, está presuntamente involucrado en una trama de corrupción con los CLAP?
– A mí no me consta que esté inmerso en corrupción el diputado Parra.
– Tampoco había quórum parlamentario para poder sesionar y no se ha mostrado la lista de asistencia. ¿Cuántos diputados hubo en esa sesión?
– Según el diputado Stalin González, habían 128 firmas, estaban los de AD, se quedó el diputado Ramos Allup, estaban los de UNT, estaban todos allí.
Para poder iniciar una sesión de la Asamblea Nacional se requiere un quórum mínimo de 84 diputados, y hasta el día de hoy, se duda sobre la cantidad de diputados que pudieron ingresar el 5 de enero al Parlamento. Además, la fracción liderada por Parra no ha podido demostrar que contaban con la asistencia requerida.
Añadido a esto, los alrededores del edificio legislativo se encontraban cercados por la GNB, impidiendo el paso de los diputados de la bancada opositora, incluyendo a Juan Guaidó, quien decidió mover la sesión a la sede de El Nacional.
– ¿Pero exactamente cuántos diputados habían en el hemiciclo?, porque hay disparidad en el número de asistencia, ¿estaban presentes los 128 diputados que firmaron asistencia?
– Estaban 51 del PSUV, 30 de los nuestros, de las regiones y 27 de fracción de AD que compartió el proceso de elecciones, y hacen el quórum reglamentario.
La sesión en la sede de El Nacional, donde 100 diputados juramentaron a la directiva actual de la Asamblea Nacional, conforme ha declarado la directiva que encabeza Guaidó, contrasta con la respuesta del parlamentario.
“Es evidente la lista de los traidores, que llegaron a 18 diputados más un secretario, más 49 del chavismo. Por ningún lado dan los números, tanto es así que el martes pasado no sesionaron porque se necesitan 84 diputados para hacer el quórum y no los tienen. Si se tenía secretario accidental, votado en plenaria con el presidente del Parlamento del año anterior, no podían sesionar. No sé de qué habla Zamuro, es una traición y ya”, manifestó al respecto el diputado de Primero Justicia Rachid Yasbek.
Agregó que: “si tenían las 120 firmas, ¿por qué no se permitió la entrada al resto de los diputados?”.
González afirmó que su decisión ya estaba tomada y que las inconformidades ya se habían planteado tanto al partido como al presidente (e.) Juan Guaidó.
Cruce de acusaciones
Luis Aguilar, secretario general de Copei en Bolívar, dijo lo contrario. “Copei sigue apoyando a Juan Guaidó, es el sentimiento del venezolano”.
Al directivo de Copei no le sorprendió la decisión del también exalcalde del municipio Roscio, ya que antes de que fuese enviado a tribunal disciplinario para ser expulsado del partido por lo ocurrido el 5 de enero en la Asamblea Nacional, pasaba por un proceso de investigación, por presuntamente disponer de bienes del partido para uso particular.
Según Aguilar, González fue destituido de su cargo de primer vicepresidente del partido, y su hermana del cargo de presidenta de Copei en Roscio, luego que dispusieran de la sede para alquileres de uso personal.
Manuel González rechazó las acusaciones, al tiempo que lanzó otras sobre irregularidades dentro de la misma organización en que militó y que asegura que se defenderá para seguir en él.
“Quiero recordarles quién vendió la sede Copei en San Félix, en Ciudad Bolívar. No quiero entrar en polémica porque hay muchos problemas sociales en el país, como lo que ocurre en El Manteco (…) Otra cosa, el G4 se repartió la CVG Internacional, igualmente se habían repartido las empresas básicas en Guayana, los cargos de importancia en Guayana ya tienen nombre, eso no puede ser”, cuestionó.
Aunque se negó a dar nombres, González prosiguió en sus denuncias contra los partidos mayoritarios de la Asamblea Nacional y recordó las acusaciones que se hicieron contra dirigentes y actuales diputados durante la gestión de Francisco Rangel Gómez en la Gobernación de Bolívar.
“Hay un parlamentario en Guayana que recibió tres vehículos de manos de Diosdado Cabello el año pasado”, añadió González.
– ¿Cuál es ese parlamentario?
– Ese es un nombre que luego les daré. No quiero acusar a nadie, pero para nadie es un secreto que el G4 era nómina de la Gobernación.
Consultado sobre esta acusación, el diputado Rachid Yasbek respondió: “todos mis compañeros parlamentarios con los que hago vida en Bolívar, la mayoría anda sin carro o con los mismos carros que teníamos cuando hicimos la campaña. La mitomanía la tiene en su máximo nivel”.
González además denunció que una semana antes de irse de vacaciones en diciembre se juramentaron a nueve parlamentarios del oficialismo y esperaron tres horas para que aparecieran sus expedientes. “Además, esos diputados que juramentaron entraban a las sesiones anteriores y votaban sin estar juramentados. ¿Cuál es el chiste?”.
“Jamás vimos a nadie del PSUV en el hemiciclo. Los que participaban eran tres diputados del Gran Polo Patriótico que decidieron cerrar filas con Guaidó”, respondió Yasbek.
Reacciones en redes sociales
El diputado suplente de Américo De Grazia, hoy en el exilio, habló de una reinstitucionalización en la Asamblea Nacional, e hizo hincapié en la defensa de los presos políticos.
Precisamente, el parlamentario reapareció en sus redes sociales pidiendo libertad plena para el dirigente sindical de Ferrominera, Rubén González, actualmente preso en un ala militar de la cárcel La Pica, en Monagas.
Las reacciones de los usuarios fueron en su mayoría en reclamo por apoyar a Luis Parra y el resto de los diputados de esa misma fracción, catalogándolo de traidor. González respondió varios comentarios y aseguró que el tiempo le dará la razón.
El diputado González reiteró que es 100% opositor al régimen de Nicolás Maduro. “Soy un opositor radical a este gobierno dictador, hay que salir de Maduro”, afirmó.
Cuestionó que en mayo de 2019 se perdiera “una oportunidad histórica cuando el pueblo salió de manera voluntaria a las calles, era el momento oportuno, pero siempre ocurren los imprevistos”.
Según González, la ruta trazada por el G4 para este 2020 era: “protestas hasta julio, no ir a las parlamentarias, y luego irse al exilio”. «Quien esté libre de culpa que lance la primera piedra”, sostuvo.
Correo del Caroní