El 23 de enero marcó dos hitos importantes en la historia de Venezuela, no solo porque en 1958 se produjo la caída de una dictadura, sino porque 61 años más tarde surgiría un líder que prometería acabar con otra nacida de un militar llamado Hugo Chávez. Era 2019 cuando delante de miles de personas en un acto público en Caracas, un diputado a la Asamblea Nacional (Juan Guaidó) se juramentó como presidente encargado, asumiendo esa lucha que traería tanto reconocimientos, como críticas.
Luego de cumplirse un año de aquella jura de Guaidó y tras una insurrección militar sofocada, el diputado, exsenador al Congreso y exgobernador del estado Mérida, Williams Dávila (AD) concedió una entrevista a El Cooperante, en la que reconoció avances, logros, aciertos; pero también desaciertos.“La democracia se conquista con esfuerzo, sacrificio, sangre, prisión, asilo y destierro como ha pasado en Venezuela”, dijo el legislador.
Tras cumplirse un año de la jura de Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela lo más correcto sería comenzar preguntando: ¿Qué ocurrió con el mantra planteado desde la oposición venezolana que contemplaba el cese de la usurpación, el gobierno de transición y las elecciones libres?
—Vamos a ser sinceros, no se ha logrado que las Fuerzas Armadas comprendan el compromiso que tienen con el pueblo venezolano en que haya un cambio en el país. Las Fuerzas Armadas no han estado a la altura de la exigencia institucional del momento, porque ellas son un factor esencial para rescatar nuestra libertad. La libertad se conquista como lo decía bolívar, por las leyes; la independencia, por las armas. En este caso no tenemos leyes en Venezuela que nos garantice la libertad del pueblo.
Entonces allí, obviamente no hemos tenido el respaldo institucional de las Fuerzas Armadas para que tomen la decisión que les corresponde, dentro del concepto de ser servidores de la República, el rol y el papel que deben ejercer frente a un estado delincuencial. De tal manera, que a un año de la decisión de nombrar a Juan Guaidó como presidente de República se ha generado una conciencia nacional e internacional de la necesidad del cambio en Venezuela.
—En el mundo de la política hoy se maneja con simbolismos y percepciones. Nosotros hemos ganado tanto en el mundo de los simbolismo, de las percepciones y de la realidad material (hechos), está en toda las encuestas de opinión donde se nota la desligitimación de Maduro.
En segundo lugar, tenemos un avance internacional extraordinario. La mitad del mundo prácticamente reconoce a Juan Guaidó; todavía nos falta Italia, Chipre y Eslovaquia. En el Parlamento Europeo recientemente sacamos 474 votos a favor de Guaidó frente 103 en contra y 100 abstenciones. También, tenemos el caso de América, logramos que se aprobara el TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca). Además de eso, se mantiene la unidad pese a las escisiones que hemos tenido por esta Operación Alacrán de bandidos y traidores que le entregaron el alma al diablo simplemente para mantenerse en quién sabe qué tipo de burbujas.
Un logro es la visibilización de la catástrofe venezolana, de la tiranía criminal que tenemos en Venezuela. No nos han logrado opacar. Qué más logro que el de la compañera diputada, Addy Valero, que dio una demostración de dignidad cuando dijo esa frase: ‘prefiero morirme antes que se muera Venezuela’. Eso, te demuestra los valores y principios que tiene la Asamblea Nacional frente a la barbarie de los traidores. Esos son logros cualitativos, simbólicos, políticos. Tenemos un pueblo rechazando a la tiranía de Maduro.
—El hecho mismo que dentro de la oposición hubo parlamentarios que se vendieron a los traidores, influyó. Aunado a eso, comenzaron a crear toda una sensación por la vía de portales y ataques contra Guaidó. Obviamente, también hemos tenido la merma porque el cese de la usurpación no se ha materializado, y la gente ha creído que nosotros éramos una presidencia con todos los recursos de un Estado, eso ha generado incertidumbre. Y hay factores que contribuyen al deterioro de la imagen misma de la oposición, pero eso es normal un proceso inédito como el que estamos viviendo en Venezuela, en el cual nosotros hemos logrado enfrentar una dictadura sin armas.
—Luis Parra es un traidor y se lo digo directamente. Todos los que están ahí le vendieron el alma al diablo. Nosotros no podemos ceder ni un milímetro frente a las manipulaciones que quiere hacer Parra y el grupo de parlamentarios “Clap” que se prestaron para el juego del régimen. La única institución legítima es la presidida por Juan Guaidó, y somos nosotros los que debemos tomar la competencia constitucional para designar un nuevo Consejo Nacional Electoral. Para eso se nombró una Comisión Preliminar donde están los representantes del chavismo, y de allí se conformará El Comité de Postulaciones mediante el cual van a salir los rectores. Ese será el Poder Electoral legítimo, no el de Luis Parra que es un paralelismo que crearon, que a su vez se contradice, porque señala que hay ‘omisión legislativa’ o que es mejor que sea el Tribunal que controla el régimen que designe el nuevo CNE.
El diputado Ángel Medina como miembro de esa Comisión de la Asamblea Nacional fue claro al decir que próximamente se va a fijar el itinerario a los efectos de designar el Comité de Postulacioes y que sea la Asamblea Nacional que nombre las autoridades del CNE.
—Aquí hay un régimen criminal, porque la única institución que no está secuestrada es la que preside Juan Guaidó. El 23 de enero de 1958 no se llegó a la libertad con facilidades, fueron 10 años de resistencia y de lucha. La democracia se conquista con esfuerzo, sacrificio, sangre, prisión, asilo y destierro como ha pasado en Venezuela. Nosotros vamos a participar en unas elecciones legítimamente convocadas por un CNE que designe la actual Asamblea. Comicios presidenciales y parlamentarios. Hay que hablarle claro al pueblo; y ese es el mensaje que le estamos dando al mundo.
Lo que quiere hacer Luis Parra y todos estos diputados “CLAP”, es nombrar un CNE a su medida y convocar elecciones a su medida, para fabricar una oposición tipo Nicaragua y de esa manera el régimen decir que los partidos de la Unidad Democrática participaron.
—Ellos pueden convocar un remedo de elecciones como lo hicieron con la Constituyente. Nosotros la desconocemos desde ya. Para mí esas elecciones son para estirar la arruga pero no va a resolver los problemas del pueblo. Creo que en este momento, más que siempre estamos cohesionados y unidos en la oposición para sincronizar las acciones internacionales, con las nacionales y las locales para lograr la libertad de Venezuela.
—Yo no veo a Maduro oxigenado, sino anclado por los grupos de poder que tiene como toda dictadura. ¿Por qué no se atreven a hacer elecciones libres? Porque no las tiene a su favor. Entonces cuál oxigenación es esa, una oxigenación como un tipo moribundo dependiente de una máquina. Esos grupos terroristas son ese aparato, son esa bomba de oxigeno que tiene, pero si se la quitan se cae.
En este punto es importante que la comunidad internacional sepa que efectivamente estamos en presencia de un régimen criminal. Nosotros no tenemos más armas que todo el pueblo venezolano y una Asamblea Nacional reconocida por el mundo entero. Nos toca exigirle al mundo que necesitamos la cooperación internacional para salir de esta dictadura.
—Claro que han sido efectivas, y esas sanciones no las pondrá de lado Europa. Ya vimos que en la resolución del Parlamento Europeo se aprueban sanciones a funcionarios del régimen que se extienden a los familiares. Esas no son sanciones para el pueblo venezolano. Han querido establecer una narrativa que aquí no hay gasolina, medicinas, comida, no hay luz, ni una actividad económica próspera porque están perdiendo 60 mil millones de dólares a causa del bloqueo y las sanciones. La realidad es que esto ha venido deteriorándose desde que (Hugo) Chávez llegó al poder, es un modelo económico y social que no funciona.
—El TIAR es un mecanismo importante que logró unificar a América por primera vez el 3 de diciembre pasado, cuando se tomó la decisión de sancionar a 29 personas de las 2 mil que están siendo investigadas. La Unión Europea puede aplicar las mismas medidas por la vía de la cooperación internacional.
Yo creo que sí, es un avance que ha significado la unidad de toda América para salir de una dictadura oprobiosa como la de Maduro.
—Sí, claro que lo hemos cometido, porque estamos luchando contra un régimen criminal y se cometen errores.
—La falta de unidad, de desarrollar una narrativa con un discurso coherente; que ya se ha venido cohesionando en este momento. Además, es un error quizá no activar la operatividad de los frentes aprobados por la Asamblea Nacional: El Frente por la Libertad, el Frente Activo por Venezuela y El Frente de la Defensa Agropecuaria. Y que emprendan las regiones junto con la capital una acción sostenida para nosotros poder rescatar la libertad.
El Cooperante