El alemán Alexander Zverev se recuperó de un mal comienzo el miércoles para derrotar al suizo Stan Wawrinka por 1-6, 6-3, 6-4 y 6-2 y meterse en las semifinales del Abierto de Australia, la primera vez que llega a la instancia de los cuatro mejores de un torneo del Grand Slam.
Zverev, séptimo preclasificado en Melbourne, es visto como uno de los líderes de la nueva generación de tenistas que podían romper la hegemonía en los torneos de Grand Slam de Novak Djokovic, Rafa Nadal y Roger Federer, que se han repartido los últimos 12 grandes.
Pero el alemán, que derrotó a Federer y Djokovic para ganar el título del ATP Finals en 2018, había salido del radar al no superar la barrera de los cuartos de final en los grandes torneos.
“Me siento increíble, no sé qué decir”, dijo Zverev. “Me ha ido bien en otros torneos, he ganado Masters, he ganado ATP Finals, pero nunca pude romper esa barrera en los Grand Slam (…) Espero que esta sea la primera de muchas”.
Zverev llegó al primer Grand Slam del año con falta de confianza tras perder sus tres primeros partidos individuales en la primera edición de la ATP Cup. En ese torneo cometió 31 dobles faltas, pero en Australia su servicio ha sido inmaculado.
El miércoles, Zverev logró 13 ‘aces’ y, mientras su oponente tenía problemas con el saque, el alemán conectó el 80% de sus primeros servicios.
“Trabajé muy duro, trabajé mucho en ello. Esto es un Grand Slam. Aquí es donde se supone que juegas tu mejor tenis y yo lo estoy haciendo”, señaló.
Reuters