Culminar el año escolar 2019-2020 en medio de la pandemia por COVID-19 se ha convertido en un reto para los docentes del municipio Guajira en el estado Zulia. Fallas de luz, de señal telefónica y de internet juegan en contra para que los alumnos puedan cumplir con el programa escolar.
Pero los maestros de la subregión se las ingenian y contaron este 30 de abril que están superando los obstáculos para que sus alumnos culminen el año escolar. Unos caminan hasta las casas de sus estudiantes para llevarles la tarea y otros, atienen a los niños en sus hogares.
Desde que el Ministerio de Educación ordenó que cada familia es una escuela, el gremio de la educación en Guajira aplica estrategias como la visita casa a casa con el fin de verificar que los estudiantes estén cumpliendo con las tareas asignadas.
En las comunidades lejanas del municipio, los maestros atienden a los niños en sus hogares con todas las medidas preventivas para evitar el contagio por COVID-19.
Yunex Hernández, directora del preescolar Ángel de la Guarda ubicado en la población de Paraguaipoa, destacó que está institución usa como vía las llamadas telefónicas a los padres y representantes y en muchas ocasiones visita las casas de sus estudiantes.
«Los docentes están haciendo sus planificaciones y lo pasan a los grupos de WhatsApp. A quien no tiene la aplicación lo llamamos para informale de las tareas que se le asignan a los estudiantes y en muchas ocasiones realizamos la visita presencial para garantizar que los niños estén cumpliendo con esta meta de culminar el año escolar a distancia», comentó Hernández.
Antonio González, director de la unidad educativa Juana Gutiérrez, contó sobre una reunión que tuvo con los padres y representantes para hacer hincapié en la importancia del acompañamiento en el proceso de aprendizaje de los estudiantes en medio de esta pandemia que sacude al mundo entero.
González señaló que los maestros de la localidad están comprometidos con brindar una educación digna a miles de niños de la Guajira y a pesar de las dificultades siguen en pie de lucha.
El Pitazo